Managua, Nicaragua. Para jugar billar, la pequeña Adriana Villar tenía que limpiar las mesas del salón de su papá y realizar las tareas de la escuela en su natal Desamparados.
Desde entonces la pasión por este deporte la lleva impregnada en la sangre y en su apellido, al punto que una disciplina que muchos consideran un vicio la llevó a estar entre las mejores 16 billaristas del planeta en el Mundial de China, este año, ser campeona panamericana en siete ocasiones y ganar doble medalla de oro en los Juegos Centroamericanos de Managua 2017, en bola 9 y bola 10, así como un bronce en bola 8.
Además, en los últimos años Villar fue la entrenadora de la selección de Nicaragua para las justas de la región, aunque al final pudo vencer a sus alumnas en la lucha por las preseas.
"Hay personas que asocian esta disciplina con los vicios, pero es todo lo contrario. Para jugar bien se necesita dormir bien, no tomar alcohol y no fumar, porque nos quiebra el pulso como decimos nosotros. Se debe tener mucha disciplina, por ejemplo, yo entreno desde las 9 a. m. y hasta las 5 p. m. A veces mis amigas me invitan a jugar pool y yo les digo que no porque estoy cansada”, aseguró Villar.
La joven de 32 años admite que el billar le abrió las puertas del deporte, el estudio e incluso le dio trabajo fuera del país.
“Actualmente estudio Gestión Deportiva gracias a una beca del Comité Olímpico y me gradúo en marzo. Asistí al Mundial en China y fui la primera latinoamericana en pasar entre las 16 mejores y en los últimos años entrené a la selección femenina de Nicaragua. Para mí el pool no es solo un juego, es mi vida, mi deporte, mi trabajo.”, añadió Villar.
La atleta oriunda de Desamparados indicó que para destacar en el billar se debe ser disciplinado y constante, porque los rivales se superan y el jugador no puede sentir que es el mejor, por el contrario hay que tener una gran concentración y evitar las distracciones.
Sobre su actuación en los Juegos de Managua 2017, la costarricense aseguró sentirse satisfecha por sus preseas y añadió que representar al país siempre es un gran orgullo. Considera que la inclusión del billar en el ciclo olímpico es un gran paso para su deporte.
“En bola 8 me desordeno en mi juego, me cuesta un poco más, por lo que la medalla de bronce fue un gran aliciente. En bola 10 me pude acomodar mejor y bola nueve es lo que más se juega en los mundiales, por lo que es lo que más se debe dominar y me siento muy satisfecha por estar representando al país”, aseguró Villar.
