Escuchar“Me hace muy feliz estar de pie sin tener a nadie atrás ni adelante mío”. Así describe el tenista José Pablo Gil su sensación al ponerse en pie tras un año y cinco meses del accidente de tránsito que le dejó con una lesión medular, sin movilidad del pecho hasta los pies.
Cuando los doctores le dieron a Gil los primeros pronósticos, caminar no era visto como una posibilidad. Sin embargo, el joven de 22 años mantuvo en su mente otra idea.
En su lenguaje sí era viable levantarse de la silla de ruedas y el pasado 19 de enero quedó demostrado.
Hace 1 año y 5 meses me dijeron que nunca iba a poder caminar y me lo insistieron muchas veces, pero cuanto más me decían que no se podía más ganas de demostrar que todo es posible, claro con muchísimo esfuerzo y dedicación se pueden conseguir esas cosas "imposibles". Por eso quiero agradecerles a todas esas personas que me han apoyado, que han creído y creen en mi, a todos ustedes que han seguido mi proceso con sus buenas vibras y oraciones. "Yo hago lo imposible, por que lo posible lo hace cualquier." Pablo Picasso
Posted by Jose Pablo Gil on Friday, January 19, 2018
Ayudado por unas férulas y barras, José Pablo dio sus primeros pasos después de aquel incidente.
Todavía no lo puede hacer sin estos sostenes, pero el avance es notorio, por eso él destaca el hecho de que ninguna persona lo sujetó mientras lo hacía. Antes a Gil ni siquiera le era posible mantenerse sentado sin un soporte en la espalda.
No esconde su satisfacción, es parte del motor para alcanzar la meta que un momento se vio como imposible.
“Cada vez estoy más cerca de volver a caminar, de dar pasos en la calle que es algo que quiero, llegar a donde mis abuelos caminando, porque se los prometí”, recalcó.
Las férulas hacen que las rodillas se mantengan rectas y recordándole al cuerpo el movimiento y dándole la opción de estar en pie.
Por ahora no ha visto a los doctores y su próxima cita será en dos o tres meses, por lo que también tiene la intención de llegar a ese día “aunque sea en andadera”, dijo con ilusión.
Seguimos trabajando duro por esa medalla de oro en nicaragua, y el sueño de ser de los mejores tenistas, todavia falta mucho que trabajar. Jajaj todavia me falta volver a levantarme para hacer el ejercicio bien 🥇♿🏀🎾 #lifegoesonwheels #wheelchairbasketball #palante506
Posted by Jose Pablo Gil on Wednesday, January 17, 2018
Los que sí han visto la impresionante evolución son sus terapeutas, quienes se motivaron al presenciar ese acontecimiento, contó Gil.
“Ha sido un esfuerzo de todos, cada día, cuatro horas de ejercicio y terapia”.
Las terapias no le han impedido seguir vinculado al deporte, más bien esto se ha convertido en impulso físico y mental para tener mejores resultados.
“Todos los terapeturas comentan que el deporte en silla de ruedas empezó para una recuperación, para ayudar a la gente a salirse de zona de confort o yo diría ese hueco en que uno se puede ir”.
Su amor por el tenis se mantiene intacto, tanto así que asistió a dos torneos, pero también añadió a su vida el baloncesto y el domingo anterior ganó el bronce con la selección en los Juegos Paracentroamericanos 2018, en Managua.
Con la constancia en ambas disciplinas ha tomado fuerza en el tronco, algo importante para que lograra ser más independiente.
“El tenis es lo que me ha dado tantas alegrías, momentos buenos y malos. En el básquet he vivido mucho, amistades que me enseñan muchísimo, tanto del deporte como de la forma de vivir de uno, de cómo hacer las cosas”, explicó.
En un año y cinco meses, José Pablo asegura que ha aprendido mucho, en gran parte, por su buena actitud ante un acontecimiento que pudo hundirlo.
Sin embargo, insiste en que el camino es largo: “Todavía me queda la espinita de llegar a caminar bien”.
