La campana sonará nuevamente para que el boxeador costarricense Carl Davis Drummond retorne al cuadrilátero, después de tres años de ausencia, en el afán de relanzar su carrera deportiva.
Davis Drummond, quien por dos años estuvo en Estados Unidos y Europa alejado totalmente del deporte, disfrutando de la vida familiar con sus hijos, tendrá un nuevo reto cuando el próximo 6 de agosto, en una velada en el hotel Punta Leona, enfrente a un viejo conocido, al colombiano Ambar Novoa.
El pugilista de peso completo aseguró que la madurez que le dan los años le hizo entender que aún puede dar de qué hablar y tiene claro que en el pasado se le acercaron personas que en lugar de ayudarle abusaron de su confianza y no le dejaron crecer en su deseo de ser mejor.
Hace tres meses Davis volvió a ponerse los guantes con la ayuda del entrenador Manuel Leiva y el preparador físico Emiliano Rodríguez, con quienes trabaja intensamente para estar listo de cara al combate ante Novoa, el cual será su reecuentro con la afición al boxeo.
Carl, quien fuera figura del boxeo profesional tico entre el 2005 y 2009 junto al promotor Efráin Vega, forjó su carrera profesional con veladas en nuestro país e incluso llegó a disputar el título de los pesos pesados de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) ante el teutón Ruslan Chagaev en el 2009, en Alemania.
Posteriormente Davis Drummond se vio envuelto en una serie de problemas personales, e incluso con la justicia, los que le apartaron del boxeo, peleando por última vez frente al panameño Luis Andrés Pineda en Panamá, en junio del 2013; perdió por nocaut.
"Me fui del país para meditar, para entender qué era lo mejor para mí y pasarla con mis hijos, pues el boxeo es un deporte de mucho sacrificio y era el momento propicio para pensar en mi futuro", comentó el pugilista de peso pesado.
"Estoy descansado no solo en lo físico sino también en lo mental. Regreso porque llevo el boxeo en la sangre, porque creo que a pesar de mis 41 años todavía no es tiempo de retirarme y me veo boxeando algunos años más como los grandes de la historia".
Carl confesó que en su momento hubo personas que en lugar de ayudarle a lanzar su carrera más bien fueron un obstáculo y por esa razón desea ayudarle a los más jóvenes y a otros pugilistas que se retiraron tempranamente frustrados.
"En la calle la gente me preguntaba cuándo volvía a pelear, tomé mi tiempo para meditar una decisión y después de pensarlo muy bien decidí que con las personas idóneas, las que realmente quieren ayudar al boxeo, se puede tener una nueva oportunidad. Siento que era el momento de dejar las cosas malas atrás y volver a subir al ring", sentenció Davis Drummond.
El limonense también tiene claro que de su paradero se habló mucho, no obstante dice estar tranquilo, porque la pasó con sus hijos y disfrutó de momentos muy buenos.
"Para mí el pasado quedó atrás. Tuve tiempo para meditar, para caminar correctamente con Dios en mi corazón pensando solo en el presente. Es cierto que nadie supo dónde estaba, por lo cual tenían derecho a pensar lo que ellos quisieran, pero lo importante es que mi guía fue el Padre Todopoderoso, porque después de la tempestad salió el sol y estoy listo para dar nuevas batallas", añadió.
Davis Drummond reiteró que la única manera de surgir en el boxeo profesional es por medio de empresarios serios que ayuden al deporte y dejando atrás a aquellos que solo desean sacarle provecho sin que le importen los deportistas.
"Me parece que ciertas personas arruinaron mi carrera profesional y las de otros boxeadores porque en lugar de promover está disciplina no la dejaron crecer, llevaron de mala forma este deporte, pero como dije es cosa del pasado, ahora vamos a trabajar para levantar el boxeo nuevamente, para darle su lugar como cuando estaba Efraín Vega y promovía peleas, aunque todo el mundo lo criticaba", recordó Carl.
"A mí nuevamente me abrieron las puertas y no pienso decepcionarlos. Estoy trabajando desde hace tres meses intensamente para llegar en la mejor forma posible, espero tener la opción de volver a pelear por un título mundial, me siento más fuerte y Novoa será apenas el primer paso, un escalón para cumplir mis objetivos y volver a armar el rompecabezas que Dios me puso en el camino, darle muchas alegrías a mi país y a los seguidores de este gran deporte".
Aún le queda boxeo. El entrenador Manuel Leiva comentó que a Carl Davis Drummond aún le queda cuerda y lo más complicado en este momento es encontrarle sparring para que se puedan ver los avances tras su regreso.
"Carl está corriendo, realizando trabajo de pesas y golpeando el saco. El problema es que no tenemos sparring que puedan exigirlo en el cuadrilátero, con quien pueda guantear. Es cierto que tiene 41 años, pero está bien físicamente, se ha cuidado y su récord es bueno (29 ganadas, cuatro derrotas y cero empates)", opinó Leiva.
"Considero que después de tres combates estará bien, Novoa es solo una prueba y una vez que demuestre su potencial lo lógico es que se marche a los Estados Unidos para buscar nuevos aires, con peleadores de su estatura y peso con los que pueda continuar con su carrera".