EscucharSan Ramón . Solo verlos pasar abonaba la nostalgia. Sesenta autos antiguos salieron a las calles para mostrar la belleza con que fueron concebidos.
Desde 1911 hasta 1974, año límite de inscripción, estas joyas del automovilismo participaron el sábado anterior en el primer Rally de Autos Antiguos que se realiza en el año.
Esta primera competencia arrancó en el Centro Comercial Real Cariari carretera a Alajuela y tuvo su conclusión en el Capitán Moreno, ubicado en el Paseo de los Turistas, en Puntarenas.
Según Allan Rodríguez, presidente del Club de Autos Antiguos de Costa Rica, esta es la cuarta ocasión en que se lleva a cabo un rally a Puntarenas.
"Es una actividad que a la gente le gusta, porque representa la oportunidad de pasear los autos que por lo general uno tiene guardados", comentó Rodríguez en San Ramón, durante un receso de 30 minutos antes de seguir en competencia.
Para el organizador, uno de los mayores objetivos que tiene el evento es que la gente observe un poco de la historia que tiene el automovilismo mundial. "Aquí tenemos un lote de autos antiguos de mucho prestigio y muy bien conservado. Hoy (sábado) contamos con un Ford T de 1911, que es uno de los primeros carros fabricados en serie por la Ford", indicó Rodríguez, quien participó a bordo de un La Salle de 1940.
En familia
Un dato interesante que tuvo el rally a Puntarenas fue que contó con la participación de pilotos y copilotos que participan en el Campeonato de Rallies 2002.
Entre ellos estuvo el piloto de Hyundai Erick Xirinach, quien compitió en un Oldsmobile sedán de 1957.
Otro de los pilotos de Hyundai, Allan Toyo Rodríguez, llegó en un MG B de 1964.
Jorge Marchena, copiloto de Subarú, compitió en un Studebaker coupé de 1953.
Ernesto Teto Rodríguez, hermano de Allan, compitió con su esposa al mando de un Mercury convertible de 1948.
Por su parte, el copiloto de Toyo , Alfredo Montealegre, y el copiloto de Teto , Francisco Balma, corrieron en un Porsche 911 de 1970.
Junto a su hija Rebeca, Rodolfo Esquivel lo hizo en un Austin Mini Cooper de 1971.
"Es bonito sacar a pasear el auto y vivir esta aventura con mi hija. Hemos tenido unos problemas con el motor, pero vamos a arreglarlo y seguir en competencia", expresó Esquivel, a la altura de San Ramón.
Además de estos vehículos, una de las mayores atracciones del rally fue el Ford T 1911 que tenía como piloto a Gaspar Ortuño hijo, y como copiloto a Emilio Gamboa.
También había Buick, Plymouth, Desoto, Lancia, Alfa Romeo, Chevrolet, Volkswagen, Fiat, Chrysler, BMW, Mercedes-Benz, Datsun, Mini Morris, Opel, Pontiac, Sumbeam, Jeep, Rover y GMC.
La ruta del rally pasó por Alajuela, de ahí tomó la carretera vieja hacia Puntarenas, por Grecia, Sarchí, Naranjo, Palmares, San Ramón, Esparza, Alunasa, Salinas y Caldera, hasta llegar a Puntarenas.
Luego de dos horas en el Capitán Moreno lo rallistas se trasladaron al hotel Fiesta, donde estaba preparada la premiación.
Rodríguez comentó que el futuro de esta actividad está asegurado pues no solo los propietarios se esmeran en tener sus vehículos con condiciones, sino que el público es muy fiel.
"Tanto en San José, como en Puntarenas, los aficionados se identificaron y brindaron un respaldo cálido, que es muy motivante".
