Buenos Aires, 23 abr (EFE).- El nadador argentino José Meolans, campeón mundial de 50 metros libre en piscina corta, ha encendido la mecha del entusiasmo del deporte de su país por los Juegos Panamericanos de 2003, al renunciar a su participación en el Mundial de Barcelona para competir en Santo Domingo.
Meolans, a quien en Argentina llaman "Tiburón", ha preferido dedicarse de lleno a su preparación para los Panamericanos de agosto, lo cual no hubiera sido posible si asistía a la cita mundial de julio en la ciudad condal.
"Es el torneo más importante del año para mí. Con mi entrenador Orlando Moccagatta decidimos que era lo mejor. Además, en Santo Domingo estará el norteamericano Gary Hall, campeón olímpico en 50 metros libre. Será un desafío muy bueno", indicó el deportista en declaraciones al matutino La Nación, de Buenos Aires.
Esta decisión es interpretada como un disparador para la adormecida expectación argentina por la competición continental, a falta de tres meses y varios días para su comienzo.
Argentina participará en los Panamericanos con 350 deportistas y su esperanza es ocupar el cuarto puesto final, según el presidente del Comité Olímpico local, Antonio Rodríguez.
Para varios de ellos, los Juegos que se celebrarán en el Caribe serán el paso fundamental para llegar a los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, y para otros la posibilidad de consolidar los éxitos obtenidos en 2002, como el equipo nacional de hockey hierba femenino, campeón mundial en Australia.
"En los Panamericanos, la base la conformarán las campeonas del mundo, por lo que este torneo lo tomamos como prioritario. Y les sumaremos algunas jugadoras que participaron del Sudamericano de Chile", comentó el seleccionador Sergio Vigil.
La cita panamericana permitirá al deporte argentino un regreso esperado en el atletismo, el de Solange Witteveen, plusmarquista sudamericana de salto en alto (1,96), quien cumplirá en julio una suspensión por dopaje y espera reaparecer con la obtención de una medalla.
También habrá expectación por el baloncesto, deporte que en 2002 generó una revolución en el país al obtener el segundo puesto en el Mundial, después de haber derrotado -primer equipo en el mundo que lo logró- a la selección de Estados Unidos formada por estrellas de la NBA.
El fútbol, con buena parte de la selección sub'20 que participará en noviembre en el Mundial de los Emiratos Arabes Unidos, y el voleibol, uno de los deportes de mayor crecimiento en Argentina en los últimos años, también acudirán con esperanzas de éxito.
Argentina obtuvo 25 medallas doradas en los Juegos de Winnipeg en 1999 y su máximo objetivo en Santo Domingo es luchar con Brasil por el cuarto puesto, seguramente detrás de Estados Unidos, Cuba y Canadá. EFE
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