
Sería interesante que algunos narradores y comentaristas deportivos utilizaran adecuadamente los gentilicios de los países que protagonizan el Mundial. Este artículo podría ayudarlos.
Presentamos, en orden alfabético, los nombres de los países clasificados para el Mundial y, entre paréntesis, su gentilicio oficial en español: Alemania (alemán), Angola (angoleño), Arabia Saudita (saudí), Argentina (argentino), Australia (australiano), Brasil (brasileño), Corea del Sur (surcoreano), Costa de Marfil (marfileño), Costa Rica (costarricense), Croacia (croata), Ecuador (ecuatoriano), España (español), Estados Unidos (estadounidense), Francia (francés), Ghana (ghanés), Holanda (holandés), Inglaterra (inglés), Irán (iraní), Italia (italiano), Japón (japonés), México (mexicano), Paraguay (paraguayo), Polonia (polaco), Portugal (portugués), República Checa (checo), Serbia y Montenegro (serbomontenegrino), Suecia (sueco), Suiza (suizo), Togo (togolés), Trinidad y Tobago (trinitense), Túnez (tunecino) y Ucrania (ucraniano).
Desde luego, existen, para algunos países, otros gentilicios de tipo histórico o popular, que podrían utilizarse cuando se pretende evitar repeticiones constantes. Así, germano y teutón (Alemania), brasilero (Brasil), tico (Costa Rica), hispano (España), galo (Francia), anglo (inglés), nipón (Japón), luso/lusitano (portugués)...
En algunos casos se aplican ciertos gentilicios, que no son apropiados; por ejemplo, carioca se refiere a Río de Janeiro y no a Brasil.
Con frecuencia se utilizan denominaciones que resultan desaconsejables por ilógicas, como llamar tulipanes a los holandeses, o ches a los argentinos.
Finalmente, siempre tratando de evitar repeticiones excesivas, es lícito y práctico utilizar gentilicios continentales o regionales, siempre que los contendores pertenezcan a distintos continentes o regiones.
Por ejemplo: los centroamericanos (Costa Rica) cumplieron un papel digno frente a los europeos (Alemania).
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