Aquel niño de 12 años, apasionado de los motores por herencia de su padre, que se arriesgó a conducir su triciclo Honda por las montañas cercanas a Ciudad Colón, será el primer costarricense en tomar parte en la competencia de motores más extrema del planeta: el Rally Dakar.
El piloto Christian Massey cuenta las horas para hacer su debut en el rali que desde joven siguió muy atento, sin pensar que un día sería el primer nacional en desafiar su recorrido, ya no en territorio africano, como en su principio se estableció, sino ahora en América.
Massey, quien viajará el 31 de diciembre a Lima, Perú, estuvo entrenando y preparándose los últimos tres años en eventos en Suramérica e incluso en Marruecos, África, para cumplir con los requisitos que le solicitó la organización del Dakar.
La competencia que se extiende por 14 etapas, del 6 al 20 de enero, pasando por Bolivia, hasta finalizar en Córdoba, Argentina.
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“Mi hermano y mi papá siempre tuvieron motocicletas, pero a mí siempre me gustó más andar por ríos, el barro, la montaña. En aquellos tiempos lo que estaba de moda eran los triciclos Honda de 75 y 100 cc, por lo que le pedí uno a mi padre. Cuando tenía unos 16 años empecé a competir en un triciclo 250 cc”, recordó Massey, hoy con 46 años.
Lo inestable y peligroso del vehículo hizo que en Estados Unidos lo prohibieran en 1986 y más tarde en Japón la casa matriz empezó a descontinuarlo, por lo que Christian cambió su triciclo por un cuadraciclo a principios de los 90.
A mí el “cross country”, la aventura y la naturaleza siempre me han gustado, es por eso que siempre preferí salir a competir por la montaña que en las pistas. Desde mi época de andar en triciclo seguía el Dakar, las grandes llanuras y las zonas desérticas eran algo que llamaba la atención, pero era consciente que era muy difícil tomar parte en este evento siendo en África”, admitió Massey.
La oportunidad. Todo cambió cuando a partir del 2008 el Rally Dakar se suspendió en su totalidad por los peligros de atentados terroristas en Mauritania. Un año después se trasladó a América y con ello se abrió la categoría de cuadraciclos.
“¿Será que lo puedo hacer? Me pregunté. Empecé a investigar a recabar información y contacté en Argentina a Daniel Mazzucco y a su equipo, quienes tienen gran experiencia y han participado en diferentes ediciones del Dakar. Desde hace tres años me integré con ellos para competir, con el fin de cumplir mi objetivo”, añadió Massey.
Para el Máster en Administración de Empresas no ha sido fácil, pues además de tener que invertir económicamente para competir fuera del país, aprender a transitar por dunas de arena y de navegación, sacrificó los fines de semana para entrenar entre 230 y 300 kilómetros por diferentes puntos del país.
“Tuve que aprender mucho de navegación y orientación en el desierto. Estuve en eventos como el Desafío Ruta 40 y otros con el Team Mazzucco para conocer y aprender, pero todo valió la pena porque Daniel (Mazzucco) tiene mucha experiencia y él nos la transmitió a todos los pilotos”, comentó Massey.
Sin embargo, a pesar de todo su esfuerzo el nacional no fue admitido en el 2017 en la modalidad de cuadraciclos, pues aplicaron muchos pilotos, con mayor experiencia que él y la organización decidió darle mayor tiempo y admitir un grupo de mayor bagaje.

“Habían pilotos con palmarés de hasta 10 años esperando una oportunidad. Esto igual no me desmotivó, sabía que estaba en el camino correcto, que había que tener paciencia y seguir preparándome de la forma correcta para afrontar el reto”, añadió Massey.
El conductor nacional prosiguió con sus entrenamientos y tomó la salida en el Merzouga Rally en Marruecos, en mayo anterior, donde ocupó el cuarto puesto en los cuadraciclos y ganó una etapa, teniendo la experiencia de enfrentar una tormenta de arena en el desierto del Sahara. Dos meses después de aquella competencia, la organización del Dakar le dio el visto bueno.
“Siento que competir en Marruecos fue un gran paso en mi meta de estar en el Dakar. La organización de está competencia es la misma, por lo que ser cuarto en mi categoría (Cuadras 4x4), ganar una de las largadas y demostrar muy buena navegación fueron aspectos que se tomaron en cuenta para que me aceptarán en el Dakar 2018”, sentenció Massey.
A pocas horas de su viaje Christian Massey guarda sus implementos y uniformes en la maleta, tratando de asimilar la oportunidad que le brindan al ser parte del rali más famoso del planeta.
“Al estar haciendo mis maletas caigo en cuenta que voy a participar en el Dakar. En el evento que siempre me gustó y soñé correr. Son una mezcla de sensaciones de perseverancia y mucha preparación la que nos tiene hoy a punto de tomar la salida”, admitió el piloto cuyo sueño empezó a bordo de un triciclo de 75cc.
