Dallas. Los Dallas Mavericks prescindieron de Dennis Rodman el miércoles y quizás éste haya sido el principio del fin de la carrera en la NBA del polémico y pintoresco basquetbolista.
El rebotero fue cesado tan solo doce partidos después de haber debutado con los Mavericks, con los que también hizo de las suyas.
Su último problema fue con el dueño de la franquicia, Mark Cuban, que era el único que tenía intenciones de darle una nueva oportunidad al díscolo jugador.
Mientras admitía que contratar al 'Gusano' Rodman era una manera de aumentar la asistencia de público y el interés en los Mavericks, Cuban también le dio a Rodman un trato especial.
Aparentemente Rodman fue malagradecido. Tras la derrota del martes en Seattle, Rodman criticó el estilo de Cuban.
"El no necesita estar entre los jugadores como si fuera el entrenador o algo por el estilo", dijo al diario Dallas Morning News el siete veces rebotero del año en la NBA y ganador de cinco anillos de campeón, dos con los Detroit Pistons (1989 y 1990) y tres con los Chicago Bulls (1996, 1997 y 1998).
"Así es como Jerry Jones (dueño del equipo de football americano Dallas Cowboys), y es una tontería. Por eso los Cowboys se fueron a pique. Necesita ser el dueño, dar un paso atrás y nombrar gente idónea que pueda enderezar a este equipo", describió Rodman, de 38 años.
Es difícil deducir a qué dirección se refería Rodman. Durante su corta estadía en el equipo de Texas, recibió seis faltas técnicas, dos expulsiones, un partido de suspensión, 13.500 dólares de multa y logró sólo tres victorias. También mantuvo una disputa con la jerarquía en la NBA, criticando a árbitros e invitando al comisionado David Stern a pelear.
Rodman promedió 14,3 rebotes por partido con los Mavericks, pero comunmente pareció desinteresado y no fue el líder de un equipo joven que intenta llegar a los playoffs por primera vez en diez años.
Actualmente Dallas tiene un récord de 24 triunfos y 36 derrotas y comparte el décimo lugar de la Conferencia del Oeste con los Houston Rockets, muy lejos del octavo, Sacramento Kings, que tiene 34 victorias y 25 traspiés.