EscucharCórdoba, 6 abr (EFE).- El jugador Daniel López Ramos, en su cuarta temporada en el Córdoba, presenció hoy el estreno de su decimotercer entrenador distinto, con motivo del primer día de trabajo de Juan Carlos Rodríguez, por lo que comentó que "aquí no le ha ido bien ni a los nuevos modernos ni a los antiguos".
López Ramos dijo en conferencia de prensa que por todo lo ocurrido en el club en las últimas temporadas "no tenemos que pensar que estamos en puestos de descenso por unos conceptos anticuados en los métodos de entrenamiento" como podría ser el caso de Crispi.
El lateral zurdo es el jugador más veterano de la plantilla, lo que le ha llevado a sufrir los males del club en los últimos años, como la salvación en las dos últimas temporadas en la jornada cuadragésimo segunda, el paso de más de 150 jugadores distintos, así como los citados trece técnicos distintos, aunque en realidad han sido más, ya que el propio Crispi lo tuvo en dos etapas, o algún otro de carácter interino como Juan Verdugo.
Aún así es más curioso el caso del delantero Pablo Villa, que sólo lleva una temporada y media y ya ha visto a siete entrenadores.
Pese a este historial, López Ramos comentó que "aún sigo aquí y ojalá nos volvamos a salvar otra vez, soy muy optimista, nos tenemos que salvar, y para ello estamos trabajando todos los días".
Añadió que "nunca sabremos si el cambio de entrenador será positivo, ahora tenemos uno nuevo y hay que pensar que todo es posible", ya que con Crispi "sólo ha habido un tramo bueno, las últimas nueve jornadas, pero eso no ha sido suficiente".
"No hemos salido de los puestos de descenso y estamos como al principio", cuando el técnico llegó en noviembre de 2004, manifestó.
Por su parte, el centrocampista Leo Jiménez se mostró alegre por el cambio de sistema de juego que introducirá Rodríguez, ya que desde su llegada a España, Crispi nunca jugó con un doble pivote, opción que le permitiría regresar a la titularidad, de ahí que comentara que "me parece bueno, estoy acostumbrado a jugarlo porque es muy parecido al que utilizo con mi selección", aunque advirtió que "los sistemas se ven luego en los partidos".
Por ese motivo, respecto a su posible vuelta al once inicial, comentó que "trabajo al igual que con Crispi, estoy a disposición del técnico", así que "si me toca jugar, bienvenido sea, y si no, pues a esperar y a mejorar'.
El venezolano valoró que el nuevo técnico "habló mucho con nosotros las cosas que él quería", sobre todo "los fallos que él ha podido notar" desde la grada.
"El mister nos ha pedido que no bajáramos los brazos, que miremos al frente porque todavía es posible la salvación, ya que él vio una entrega increíble en los partidos", indicó.
Sobre la despedida de Crispi dijo que "se acercó, nos dio las gracias por todo lo que pudimos hacer por él, y nada más, creo que son situaciones incomodas para ambas partes". EFE
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