Sao Paulo, 15 jul (EFE).- La justicia brasileña absolvió hoy al ex futbolista Edson Cholbi Nascimento "Edinho", hijo de Edson Arantes do Nascimento "Pelé", de una acusación de homicidio en un caso ocurrido hace trece años.
Edinho, que está preso desde el mes pasado por supuestos vínculos con traficantes de drogas, fue absuelto por un tribunal de la ciudad de Santos, a 72 kilómetros de Sao Paulo, en un juicio que terminó en la madrugada de hoy.
El hijo de Pelé había sido acusado de la muerte del jubilado Pedro Simoes Neto, quien fue atropellado en 1992 en una avenida de Santos donde Edinho y su amigo Marcilio José Marinho de Melo apostaban carreras de autos.
Por esa muerte, Edinho y su amigo fueron condenados en 1999 a seis años de prisión en régimen semiabierto, pero los abogados de ambos apelaron.
En el nuevo juicio el amigo de Edinho, acusado de dirigir el automóvil que atropelló a Simoes Neto, fue considerado culpable de homicidio culposo (sin intención de matar) y condenado a un año de prestación de servicios comunitarios, pero la pena ya prescribió.
Edinho, de 34 años, estuvo acompañado en el tribunal por su madre, su esposa y otros familiares, pero Pelé no compareció.
"Fui testigo de una tragedia", dijo Edinho al juez Gilberto Ferreira da Cruz, al explicar su participación en el caso, y negó que el día en que ocurrió el atropellamiento hubiese estado bajo los efectos del alcohol o las drogas.
Edinho, que como futbolista no tuvo mayor éxito, está detenido desde el pasado 6 de junio por supuestos vínculos con una organización de narcotraficantes de Santos.
El ex futbolista ha negado que tenga negocios con traficantes de drogas pero admite que es adicto a la marihuana desde que abandonó el fútbol, a fines de los años 90, y por eso mantenía contactos con otras personas que también están detenidas por narcotráfico.
En declaraciones hechas días después de su arresto, Edinho pidió ayuda para superar la adicción a las drogas y dijo que sabe que por sus contactos con bandas delictivas puede pasar algunos años preso.
Al día siguiente de la detención de Edinho, Pelé lo visitó en la cárcel, donde lloró y dijo que "para cualquier padre es triste ver a su hijo involucrado con grupos así". EFE
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