Las Palmas de Gran Canaria, 24 jun (EFE).- Una invasión de campo de numerosos seguidores de la UD Las Palmas antes de la finalización del encuentro provocó que la fiesta por el ascenso a Segunda del club amarillo se viera postergada durante unos minutos por los destrozos producidos en las redes de ambas porterías del Estadio de Gran Canaria.
Una señalización del colegiado castellano-leonés Francisco Llorente mal interpretada tanto por jugadores como por afición estuvo a punto de convertirse un serio revés para la celebración, ya que durante muchos minutos se trabajó por parte del cuerpo de seguridad del recinto deportivo en desalojar a los invasores.
Todo ello llevó a pensar que el encuentro tuviera que ser reanudado, tras la reparación de los daños; sin embargo, el árbitro, una vez en los lindes del campo, tomó la decisión de pitar el final del partido para algarabía general. EFE
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