Buenos Aires, 11 may (EFE).- El hijo mayor del ex futbolista colombiano Carlos Valderrama se sumó a los entrenamientos de las divisiones inferiores del Racing de Avellaneda y busca cumplir uno de los pocos sueños truncados de su padre: jugar en Argentina.
En una entrevista publicada hoy por el diario "Clarín", Alan Valderrama reconoció que "es una presión" llevar el apellido de quien es considerado el mejor jugador de Colombia en los últimos tiempos y colgó las botas hace dos años.
"Las comparaciones son inevitables, pero mi juego es diferente. Yo soy un volante de ida y vuelta, con mucho más vértigo que mi padre", aseguró el joven de 20 años, que tampoco luce la cabellera rubia y ensortijada que caracterizó al "Pibe".
Alan no tiene pasado de futbolista profesional, aunque jugó para varios colegios de Estados Unidos, donde completó sus estudios secundarios y vivió hasta que decidió probar suerte en Argentina de la mano de un grupo empresario.
Ser el hijo de Valderrama "es una presión, pero trato de no volverme loco y mi papá me dice que sea yo mismo, que nadie se anime a decir que juego porque soy su hijo", manifestó.
Aunque por ahora no tuvo contacto con el director técnico del Racing, Ubaldo Fillol, y en la plantilla están cubiertas todas las plazas de extranjeros, el juvenil ya está entrenando con las divisiones inferiores del club.
El mayor de los Valderrama es fanático del Boca Juniors, "como la mayoría de los colombianos", aunque ahora su anhelo es cumplir con la cuenta pendiente de su padre, que hace unos años estuvo a punto de jugar en el Newell's Old Boys de Rosario. EFE
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