Bayonne (Francia). Tyler Hamilton, el hombre que ha pedaleado casi todo el Tour de Francia con la clavícula fracturada, ganó ayer su primera etapa en la clásica gracias a una sensacional fuga en solitario.
A la sombra de su compatriota estadounidense Lance Armstrong durante su trayectoria ciclística, Hamilton se impuso en la etapa 16 con tiempo de 4 horas, 59 minutos y 41 segundos, en el recorrido de 197,5 kilómetros entre Pau y Bayona, última jornada que se corre en los Pirineos.
A falta de cuatro etapas, Armstrong, quien logró una gran victoria en la etapa 15, retuvo la casaca amarilla de líder y aventaja por 67 segundos a su archirrival alemán Jan Ullrich, campeón del Tour 1997.
Proeza
Hamilton, jefe de filas del equipo CSC, fue el triunfador sentimental de ayer.
Había comenzado la jornada como sétimo en la general, 9 minutos y 2 segundos detrás de Armstrong.
Con su descomunal esfuerzo, avanzó una posición y podría quedar quinto o cuarto cuando acabe el Tour, el domingo en las calles de París.
El estadounidense ha llamado la atención por su coraje y determinación por seguir en la prueba tras haber sufrido una aparatosa caída en el segundo día de la maratón ciclística.
Armstrong le dio a Hamilton un abrazo cuando se encontraron en la meta. “Creo que se trata del día más importante del Tour. Es algo increíble”, dijo Armstrong.
Hamilton se fugó en solitario por más de 140 kilómetros.
Durante un momento logró abrir una brecha de más de cuatro minutos, pero al final cruzó la meta con una diferencia de 1:56.
“Me parece sensacional. Fue muy difícil. La verdad es que no lo puedo creer”, dijo Hamilton tras la etapa.
Nada cambió en la clasificación general, con Armstrong al frente con sus 67 segundos de ventaja sobre Ullrich.
El kazajo Alexandre Vinokourov permanece tercero a 2 minutos y 45 segundos detrás del estadounidense.
El campeón del Tour casi con seguridad se decidirá con la contrarreloj del sábado antes de la entrada a los Campos Eliseos de París.