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El Papa Francisco, quien falleció este lunes 21 de abril a los 88 años, tuvo un gesto que llenó de orgullo a todos los costarricenses durante su visita a Brasil para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en 2013.
En su recorrido en el papamóvil por las calles de Copacabana, en Río de Janeiro, el tico Diego Lizano comenzó a grabarlo y a gritarle muy emocionado, llamándolo por su nombre y expresándole que era de Costa Rica.
El Papa Francisco se volteó al escuchar los gritos y empezó a buscar en el papamóvil hasta que sacó una camiseta de la Selección Nacional, lo que enloqueció a Lizano, a quien no le salía la voz de la emoción en aquel momento.
Muchos costarricenses comenzaron a comentar en sus redes sociales sobre ese gesto. Otros ticos aseguraron que fue como una bendición para la Selección Nacional, que un año después, en el Mundial de Brasil 2014, realizó su mejor presentación al llegar a los cuartos de final.
Pero el Papa Francisco no solo tuvo en sus manos aquella camiseta de la Tricolor. En 2014, Fernando Sánchez, entonces embajador costarricense en el Vaticano, le obsequió otra camiseta de la Sele, un año después de su nombramiento.
También lo hizo Bryan Ruiz, quien en 2016 le entregó una cuando fue invitado a un partido de fútbol interreligioso por la paz, que se celebró el 29 de mayo en el Estadio Olímpico de Roma. Allí el Papa lo recibió e incluso recordó la gesta del combinado patrio en el Mundial de Brasil 2014.
Finalmente, el expresidente Carlos Alvarado le regaló otra camiseta de la Selección durante la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Ciudad de Panamá, en 2019.
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