
Aunque la Selección Femenina logró la clasificación a las semifinales de los Juegos Panamericanos, este sábado deberá reafirmar el por qué avanzó hasta esa instancia. Pero no competirá únicamente ante 11 jugadoras, sino que lo hará frente a un fútbol profesional muy lejano al que se vive en suelo costarricense.
Si bien es cierto la nómina Tricolor cuenta con nueve legionarias que pueden vivir del fútbol en ligas de mayor nivel, entre ellas Estados Unidos y España, y que en el conjunto albiceleste solo hay cinco que juegan en una liga extranjera, el fútbol local en esa nación suramericana está en otro nivel.
Mientras en Costa Rica no se tiene liga profesional, contratos y mucho menos un salario, el fútbol argentino ha vivido desde marzo una serie de cambios hacia la profesionalización.
“Últimamente se ha logrado en algunos casos la profesionalización mediante contratos, como en el caso del club River Plate, con 15 contratos, Boca Juniors, con 23, y San Lorenzo, con 15. En este sentido se ha dado un gran paso, aunque todavía se sigue luchando para que alcance el mismo nivel de profesionalismo y reconocimiento que el masculino”, comentó Guillermina Cúneo, periodista argentina del medio Talento Fem.
La propuesta es impulsada por la Asociación Femenina de Fútbol Argentino, que se encarga de pagar salarios a algunas jugadoras de la Primera División.
Además, clubes masculinos como Boca Juniors, River Plate, San Lorenzo, Racing Club, Independiente y Estudiantes de La Plata tienen su propio equipo femenino.
También, las suramericanas viven un año de ensueño, pues obtuvieron la clasificación al Mundial Francia 2019 luego de 12 años de ausencia y lograron una gran actuación después de dos empates y una derrota, alcanzando mayor visibilización de su fútbol.
Las costarricenses, en cambio, no lograron asistir a la cita mundialista y compiten en una liga amateur. El juego está pactado para este sábado a las 4:30 p. m.