EscucharEn 1950 unas muchachas que jugaban en un potrero en San Ramón de Tres Ríos sentaron las bases del fútbol femenino.
A pesar de los prejuicios de la época se formó el Club de Fútbol Costa Rica, donde jugaban las azules contra las rojas, gracias a la idea de los hermanos Fernando y Manuel Bonilla.
Las crónicas de la época relatan de la elegancia que se vivía en los partidos de las mujeres. El toque y la entregan eran elementos indiscutibles en esos encuentros.
Así se dieron los primeros pasos del fútbol femenino criollo.
¿Quien se iba a imaginar que 64 años después se estaría celebrando un mundial femenino en su país?
El camino de las selecciones en este país ha sido largo. En 1990, la Selección mayor participó en el su primer premundial en Haití.
Karla Alemán era la capitana de ese combinado, que cayó ante Canadá, Haití y venció a Jamaica.
Fue hasta en el 2008 que Costa Rica logró conseguir un boleto a una Copa Mundial Sub 17, que se celebró en Nueva Zelanda, Juan Diego Quesada era el técnico.
En esa edición, las ticas perdieron los tres partidos, anotaron un gol y recibieron ocho.
Dos años más tarde, la base de esa selección consiguió clasificarse al Mundial Sub 20 celebrado en Alemania, con Randall Chacón como director técnico. Cayeron en los tres cotejos, concretaron dos anotaciones y permitieron nueve.
Desarrollar el talento. “Aquí hay mucho talento; sin embargo, muchas jugadoras tienen que irse al extranjero para poder utilizarlo porque aquí hace falta mucha estructura”, destacó Karla Alemán entrenadora del equipo de Arenal.
“En los últimos años se ha dado un gran crecimiento; sin embargo aún hay muchas barreras con respecto al machismo”, destacó la capitana de Moravia, Karen Zúñiga.
“Espero que con el mundial se puedan fortalecer las bases del fútbol femenino, para que las chicas puedan empezar su desarrollo desde temprano”, aseguró Alemán.
