Orlando Sinclair corrió hacia un costado para festejar su gol y en el área, Bryan Cruz, árbitro del encuentro, hizo lo mismo, pero hacia el centro de la cancha para dar por válido el tanto del delantero.
Osvaldo Luna, asistente dos de Bryan Cruz, también corrió por su línea, avalando la conquista. Nunca se quedó de pie, pero mientras los aficionados festejaban la conquista de Sinclair, el panorama cambió de un momento a otro. Luna llamó al central, le dijo algo que observó y Cruz anuló la conquista por posición prohibida de Orlando Sinclair.
Greivin Porras, analista arbitral, manifestó ante consulta de La Nación, que Bryan Cruz se equivocó, o lo embarcó Osvaldo Luna, porque en la acción no había posición adelantada.
“Jamás había fuera de lugar. El árbitro asistente lo marca, pero no había nada. Los dos corren hacia el centro y después lo llama. Es muy extraño porque quien manda es el central, el asistente es alguien al que se le puede consultar, pero la determinación es del árbitro”, dijo el analista.
Porras añadió que la autoridad del árbitro quedó en entredicho, primero por la decisión que toma con su línea y luego por la forma airada en que le reclamó Mariano Torres. Según Porras, equivocado o no, Mariano debió guardar respeto al central y aceptar la determinación, sobre todo porque lo amonestaron, pero al reclamar con insistencia, Bryan Cruz debió mostrarle la tarjeta roja.
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