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Tras el pitazo final del árbitro Randall Poveda, las emociones de un clásico vibrante se trasladaron a la zona de camerinos.
Las palabras del vicepresidente morado Alberto Raven, cuestionando el estilo de juego de la Liga, agitaron a los jugadores rojinegros, que ahora esperan con ansia la llegada del partido de revancha.
Armando Alonso, en la misma entrada del camerino, dejó ver su enojo y a la misma vez su prudencia.
“Hoy (jueves) no voy hablar. Es que ese señor en su vida ha pateado una bola. Estoy caliente, no voy hablar”, dijo el Caya antes de saludar a Freddy Navas, padre de Keylor Navas, arquero del Real Madrid.
La bronca interna en el plantel erizo no se esconde.
Ayer, en conferencia de prensa, el goleador rojinegro llegó sin disimulos. El enojo era evidente en su ceño y sus palabras reafirmaban lo que se veía.
Su primera respuesta fue tajante, con un tono de voz fuerte: “Nos ganaron 1-0, nada más”.
El plantel del técnico Óscar Ramírez refleja hambre de revancha. Las frases venenosas de la dirigencia saprissista, que cuestionan de manera directa el estilo de juego de un Óscar Ramírez ganador en los últimos cuatro años, inflan el deseo de un equipo ansioso por disputar el juego de vuelta casi que de inmediato.
“Hay muchas ganas, ya queremos que llegue el partido, uno desea que los días se pasen rápido.
“Sabemos que tenemos un gran equipo al frente, pero nosotros ya queremos jugar en nuestra casa, con nuestra afición y el lunes saldremos con todo a ganar. No podemos guardarnos nada para lo que falta”, declaró Alonso.
El defensor Kenner Gutiérrez considera que la ventaja que tiene el Saprissa es manejable.
“Hay que ser sincero, el equipo tiene mucho ímpetu, muchas ganas de que se llegue la hora. Sobre el planteamiento hay poco que hablar, lo táctico queda de lado y lo que empieza a valer acá es el corazón más que la táctica”, dijo Gutiérrez.
La razón tampoco queda de lado. Los manudos consideran que deben mantener las precauciones, pues otro golpe de los saprissistas sí pondría las cosas cuesta arriba para los erizos.
“Alajuelense ya sabe remontar, hay que tener claro que no todo debe ser rápido.
“Un gol puede caer al minuto uno o al 90, todo es paciencia”, finalizó Gutiérrez.
