Zlatan Ibrahimovic no ha ganado la Champions League en su larga carrera, tampoco estuvo ni cerca de llevar a Suecia a buen puerto en un campeonato mundial, pero ya hace unos años está entre los jugadores más emblemáticos del fútbol.
Se debe a su juego, pero también a su actitud. Ibra es más que un deportista, es un producto que se sabe mercadear muy bien.
Lea: Zlatan Ibrahimovic anuncia que jugará en el Manchester United
Impone sus reglas y parece manejar su entorno al dedillo. Si por la aceptación del público y de los clubes se saca un resultado, este ha sido positivo.
En el 2015 el sueco ocupó el sexto lugar como el futbolista con más camisetas vendidas, solo por detrás de Lionel Messi (Barcelona), Cristiano Ronaldo (Real Madrid), Neymar (Barcelona), Eden Hazard (Chelsea) y Alexis Sánchez (Arsenal).
Desde su primer traspaso de club, del Malmö al Ajax de Ámsterdam, hasta su llegada al París Saint Germain, el delantero casi que ha triplicado su precio en el mercado. El conjunto holandés pagó 7,8 millones de euros (¢4.000 millones) y el francés sacó de su billetera 21 millones de euros (¢12.000 millones).

Es evidente que con el tiempo los precios suben, pero entre sus diferentes cesiones han pasado 12 años y han provocado que se desembolse por él unos 169,1 millones de euros (unos ¢102.000 millones).
En su nuevo destino, el Manchester United, las cifras no se quedan cortas. En esta ocasión no fue un traspaso, pues era jugador libre, pero el equipo de los Diablos Rojos le pagará por semana $290.000 (¢158 millones), según medios británicos.
Por ahora el club inglés ni siquiera ha hecho oficial la llegada del sueco, sino que fiel a su estilo fue el mismo futbolista quien lo anunció.
La atención que recibe parece ser motor para sí mismo, tras anunciar su salida del París Saint Germain salieron a la luz varios destinos.

De hecho el pasado 7 de junio convocó a una conferencia de prensa, la asistencia no defraudó y la esperanza de que diera a conocer dónde jugaría saltaba como la principal atracción.
Sin embargo, el sueco hizo su propia jugada y el motivo de la reunión con la prensa e incluso algunos aficionados fue para desvelar su línea de ropa, un sueño que hacía realidad.
Su egocentrismo ha sido tan criticado como exaltado. Los seguidores de Ibracadabra resaltan su forma irreverente de mostrarse, no oculta sus pensamientos ni sentimientos.
Ese carácter rebelde lo construyó desde niño, mientras crecía en el distrito marginal de Rosengard, en Malmö.
Ahí nació, en 1981, justo cuatro años después de que su padre bosnio y su madre croata llegaran a Suecia desde Bosnia y Herzegovina con la intención de buscar un futuro mejor.
Así lo describe el periodista y escritor sueco David Lagercrantz en el libro del futbolista Yo soy Zlatan.
Con diez años, Zlatan robó algunas bicicletas. La vida del delantero no fue fácil y el fútbol se convirtió, sin pensarlo, en la posibilidad de mejorar su calidad de vida.
Aun con su actitud, el europeo ha mostrado posiciones solidarias, colaborando con la niñez, incluso, en una ocasión pintó su torso y su espalda con múltiples tatuajes temporales que incluyen nombres de niños que viven con hambre.
Ibrahimovic lo explicó en este video:
Zlatan es fútbol y mercadeo. Él mismo, rodeado de todo un equipo, ha creado su propia marca. La ciudad de Manchester será el nuevo escenario para imponer su estilo.
Las mejores frases de Zlatan Ibrahimovic
1. "Mourinho dice lo que le apetece. Me cae bien. Es el líder de su ejército (…). Se convirtió en alguien por el que estaba dispuesto a dar la vida".
2. "Una cosa es segura: una Copa del Mundo sin mí no tiene nada de interesante, no hay razón para esperar algo del Mundial". Esto lo dijo luego de que Suecia quedara fuera del Mundial 2014.
3. "Solo Dios sabe... Y estás hablando con él ahora”. Un periodista le preguntó qué equipo clasificaba al mundial. Tras la primera respuesta de Ibrahimovic, el periodista le dijo que era complicado hablar con Dios, por lo que le respondió que ya lo hacía.
4. Su esposa cumplía años y le consultaron cuál sería el regalo: "Nada, ella ya tiene a Zlatan".
5. "Ven a mi casa y verás si soy gay. Y trae a tu hermana". Eso le respondió a otra reportera cuando le preguntó sobre su sexualidad.
6. "Estamos buscando un departamento (en París). Si no encontramos ninguno, entonces probablemente compraré un hotel". Esas fueron de las primeras palabras del sueco cuando firmó con el PSG.
7. Los periodistas han sufrido (o reído) por las frases del sueco. Esa fue una de las respuestas que le dio a uno cuando le preguntó por unos rasguños en su cara: "Tendrás que preguntárselo a tu mujer".
8. "Cuando me fichó, Guardiola compró un Ferrari, pero lo dirige como un Fiat", dijo sobre el técnico español cuando lo dirigía en el Barcelona.
9. Semanas antes de confirmar su pase al Manchester, aseguró: "No hay confirmación sobre el United, hay que tener paciencia. Sigan haciendo historias sobre mi futuro que me divierten. Y cuando me canse les diré dónde voy".
10. "Soy el mejor jugador del mundo. Realmente me siento así. No necesito un Balón de Oro para demostrar que soy el número uno".
