En la liga mexicana de fútbol André-Pierre Gignac cosecha amor y odio, es uno de sus mejores jugadores, pero sus encontronazos con los árbitros, la prensa y los aficionados hablan de un hombre de caracter fuerte.
Sin embargo, fuera de la cancha el francés ha conmovido hasta a sus detractores, luego de publicar un emotivo video en el que pide ayuda para pagar el tratamiento de una niña de siete años que tiene un tumor cerebral incurable e inoperable.
El centro-delantero de 35 años, que milita en los Tigres de Monterrey, no pudo resistirse a la carta que le envió Zoe, la pequeña de origen francés que se encuentra en la misma ciudad mexicana, recibiendo quimioterapia intra-arterial, combinada con inmunoterapia, para atender su padecimiento.
Ella padece un glioma de tronco encefálico infantil (DIPG, por sus siglas en inglés), la esperanza de vida es de 9 meses y las posibilidades de sobrevivencia de un 1%, según resume la biografía de la menor.
"...me dicen que estamos de vacaciones largas, pero pasamos mucho tiempo en el hospital y no soy tonta, yo sé bien que tengo una enfermedad, porque la gente seguido habla de mis ojos, mi cabeza y de recuperar las fuerzas de mis piernitas y me hacen un montón de miserias, para después decirme que soy muy valiente", decía la carta de la pequeñita.
Es por ello que Gignac, conmovido algunas veces hasta las lágrimas, grabó un pequeño video y lo divulgó en redes sociales, para hablar de la enfermedad de Zoe y pedir donaciones para ella y otras personas con el mismo mal.
Con el apoyo de su esposa Deborah, ambos recolectan artículos de deportistas de talla mundial para una subasta que se realizará el próximo 27 de setiembre, con la que pretenden pagar los tratamientos de Zoe en tierras mexicanas.
Según la página de Tigresoficial, esta subasta contará con camisas y tacos de Cristiano Ronaldo y Messi.