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¿Qué fue lo que pasó con la gramilla híbrida del Estadio Azteca que por varios días se vio muy maltratada? Según informó la administración del Coloso de Santa Úrsula, en las últimas semanas se efectuaron cambios en el sistema de drenaje y nivelación.
Y ahí es donde parece que estaba el origen del colapso del césped en la época de lluvias intensas en la Ciudad de México.
Este sábado es el ‘reestreno’ del campo, que tras efectuársele esas correcciones, le instalaron de nuevo una gramilla híbrida, 90% natural y 10% sintética construida por Turf Managers Specialist (TMS), la empresa nacional que dirige el tico Enio Cubillo.
En una amplia entrevista con La Nación, el arquitecto tico cuenta su verdad sobre la gramilla híbrida del Estadio Azteca.
— ¿Con esos cambios en los drenajes y la nivelación la cancha ahora sí debería verse bien como las otras siete que usted ha hecho?
Hemos estado viendo los comunicados que ha estado sacando el Estadio Azteca con respecto a los trabajos que se están haciendo y evidentemente en el transcurso de como había estado la gramilla, se habían ido detectando ciertas falencias que podían dar al traste también a lo que se quería.
Como dice el comunicado, ellos trabajaron en el tema de los drenajes, una renivelación del terreno y volver a colocar el pasto nuevo.
Es un pasto que evidentemente igual es híbrido y que fue construido por nosotros, por nuestra empresa.
Nuestra labor allá, con respecto al América y el Azteca, fue la construcción de 20.000 metros cuadrados de pasto híbrido, tanto en el Estadio Azteca como en Coapa (lugar de entrenamiento) y en un vivero.
Y no es como mencionaron unos medios de comunicación, que es que el Estadio Azteca estaba comprando zacate de un vivero. Evidentemente eso es falso. En este tema de los campos, cuando se habla de vivero, es una zona donde se tienen 4.000 o 5.000 metros cuadrados de este pasto para hacer este tipo de cambios.
Hay que recordar que el pasto viene siendo un ser vivo y que con el tránsito y demás se puede dañar y se utiliza para hacer el cambio.
Estuve viendo imágenes, trabajaron el tema de los drenajes, en la renivelación y se puso la gramilla híbrida nuevamente. Creo que son muy buenos los trabajos que se realizaron y que van a dar grandes resultados.
— Si arreglaron los drenajes y se hicieron trabajos de nivelación, ¿la gramilla híbrida como tal no era el problema?
Son temas complicados. Evidentemente se han ido viendo conforme pasan los tiempos, las lluvias, el tránsito que ha tenido la gramilla y si se tomó la decisión de hacer este tema de los drenajes y volver a nivelar, porque evidentemente cuando se hacen drenajes se daña la nivelación que tiene la cancha, es una de las soluciones y sigue siendo el pasto híbrido, que sabemos cuáles son los rendimientos y cuáles son las ventajas que tiene.
Mucho de lo que se ha hablado, porque a partir de esto salieron mil y un expertos hablando del tema y dando opiniones, pero por ejemplo, una de las cosas que dicen es que el pasto híbrido no era para el territorio mexicano por las condiciones del clima y porque era un pasto para Europa donde cae nieve.
Eso es falso, porque nosotros en Liga Deportiva Alajuelense tenemos cuatro pastos híbridos, aquí no cae nieve, las condiciones del clima son similares a las de México con lluvia y mucho sol, así que es más un tema de desconocimiento.
Hubo un momento en el que debíamos mantener la calma y no dar entrevistas, pero desde hace dos años en el Morera tenemos las canchas y sabemos los beneficios de las gramillas híbridas.
Hemos hecho consultas con nuestros amigos de Europa para revisar y analizar si era eso y llegamos a la conclusión de que no. Otras circunstancias pudieron dar al traste con la primera que se sembró y ahora volverá la liguilla e igual, con pasto híbrido.
— A usted lo contrataron para hacer la cancha, después del estreno vinieron los problemas en esa época de lluvias, la recuperaron y usted la entregó verde, pero ¿hasta qué momento es que llega la relación suya con esa gramilla?
Nosotros tenemos un contrato por construcción de la gramilla y de la construcción de los 20.000 metros cuadrados. Ya después, el mantenimiento será diario del equipo de mantenimiento del Estadio Azteca, los eventos y la cantidad de lo que se haga o no se haga es una determinación totalmente de ellos.
Nosotros seguimos dos o tres meses después de construida la cancha, de ir viendo qué es lo que se hacía, pero ya las directrices son de ellos y uno ve los partidos.
Es un tema meramente del Estadio Azteca, que no dudo que a pesar de la adversidad que han tenido, lograron tener buenos resultados y no dudo de la capacidad de la gente que está ahí, porque trabajamos con ellos ahí y yo creo que tendrá un buen resultado esta gramilla.
— A la gramilla del Azteca se le dio poco tiempo, se terminó de instalar y de inmediato la usaron. ¿Eso pudo influir en algo?
Yo creo que igual todo es parte de lo que la gente habla sin conocimiento, va a suceder similar ahora que acaban de terminar la instalación y ya está en perfectas condiciones.
Esa es una de las bondades que tiene el sistema híbrido, evidentemente se han arreglado ciertos temas, drenajes y demás, por ahí puede venir el tema de una ayuda más al campo.
Una cancha es como el iceberg, todo el mundo ve solo la punta que es el verde del campo, pero debajo de eso hay una estructura muy grande que hace que el funcionamiento de un campo termine siendo bueno en el desarrollo del fútbol.
Con los arreglos que se han hecho va a estar bien, no dudo que pueda estar en excelentes condiciones y que la gente se quite ese tabú.
Es algo mediático lo que sucedió, porque vea que Pachuca tiene, Cruz Azul tiene, América tiene y la pasaron para el Azteca, entonces al final de cuentas la que estaba en el América es la que está ahora en el Azteca y no pueden decir que estaba mal.
En Cruz Azul están fascinados, igual que en Pachuca y en la Liga creo que ha dado muy buenos resultados.
— ¿Cómo fue durante todo este tiempo afrontar la ola de críticas que surgieron por el mal estado de la cancha?
Eso lo hemos visto desde varias perspectivas. Una a sabiendas de lo que estamos haciendo. Dos, que desde hace tres o cuatro años que nosotros nos metimos en el mercado, yo lo podría llamar como alborotar el panal, porque era algo que estaba muy tranquilo.
Antes nadie pensaba en si la cancha estaba fea, buena, bonita, verde, que si había diseños o si no había, entonces creo que esta revolución de cambiar de ver el terreno de juego, la profesionalización que le hemos dado a este tema, las nuevas técnicas de mantenimiento, qué nuevas técnicas con semillas, los formatos y el llegar a México.
Es un mercado complicado, nosotros pudimos dar el salto y tanto en el mercado nacional como internacional genera celos, un mercado abarcado por alguien y ahora tiene competencia y ahora es competencia para todo.
Las condiciones de los terrenos que tenemos en Costa Rica son muy buenas y creo que eso conlleva a esa roncha. Para nadie es un secreto que nosotros en el Morera aparte de mantener la gramilla somos muy manudos y estamos muy metidos con el tema de infraestructura y eso uno lo ve, cuando ve periodistas que cubren a Saprissa, a Herediano, a Cartaginés, que cubren otros campos y que uno les siente que son ataques personales.
Como eso de que la cancha que puso el tico la están quitando y están comprando zacate en un vivero, cosas que son majándonos la cola entre los mismos ticos, malintencionadas al ser falsas. Esto es un servicio que nosotros como empresa damos y que sabemos los riesgos que tenemos de que se de o no se de, pero en cierto momento se cuestiona uno si estamos o no haciendo bien las cosas.
Al hacer una retroalimentación, eran momentos en los que había que tener calma, que es parte de saber manejar una empresa, mantener la calma, manejar el momento de crisis y saber que las cosas continúan.
Seguimos teniendo contactos, se vienen nuevos proyectos y no nos quedamos en lo que tenemos. Si se cometió un error hay que mejorarlo y salir adelante con las gramillas que mantenemos y los nuevos proyectos que se avecinan.
— Hasta el momento ha hecho ocho canchas híbridas y de las ocho solo una generó bastante problema, ¿eso qué le dice?
Nosotros hicimos cuatro en la Liga, en Pachuca, Cruz Azul, el Azteca y en el América. Hemos estado por distintas partes dando capacitaciones y asesorando a la gente y creo que mucho de todo esto nos da más conocimiento, un manejo de crisis y del proyecto en sí, porque esto terminó siendo una graduación para nosotros en el manejo del campo, en el día a día, de lo que se viene.
Cuando se ve que de ocho, una es la que dio problemas, hay que revisar cuáles son las situaciones, qué se hizo y seguir.
Fue como nos pasó hace poco en el Morera, en una de las áreas, por un exceso de uso que hubo se vio mal y nada, tocó terminar el partido y al día siguiente trabajarla. Si usted ve esa área hoy, ahí parece que no pasó nada. Son cosas de las que se aprenden, trabajar y seguir.
Si alguien creía que nosotros a raíz de esto íbamos a cerrar, a claudicar o no seguir en el mercado, se equivocaron. Ahora seguimos más fuertes y queremos seguir capacitándonos y haciendo cosas nuevas, aparte de seguir con los trabajos que tenemos.
— En redes sociales se dicen muchas cosas y entre lo que ahí se habla, está que a usted lo echaron de Cruz Azul y de Pachuca, de los equipos mexicanos con los que ha trabajado, ¿es cierto, qué pasó o cómo está la relación con ellos?
Todo eso es mentira y es parte de la competencia, es parte muchas veces de periodistas que lo contactan a uno y si uno cree que no es el momento para dar la entrevista, dan una nota falsa, como una periodista en México de ESPN que me busca y le dijimos que no. Dos días después salió una nota de que nos echaron de Cruz Azul y que nos demandaron y el día anterior estuve en Cruz Azul. Y si yo voy hoy a México, voy a Cruz Azul a ver la cancha. Tenemos muy buena relación con ellos.
La vez pasada también, cuando salieron mentiras en medios mexicanos, me llamaron Marco Garcés y Jesús Martínez, del Pachuca, que teníamos una muy buena relación, que la gente los buscaba para que hablaran mal de mí y que no tenían ninguna razón para hacerlo.
Tengo contratos con ellos, se hacen las labores que nos tocan en esos contratos y el mantenimiento les toca a ellos.
— ¿En qué momento es que se despertó esa competencia entre las mismas canchas de determinar cuál es la mejor?
Aquí los estándares son altos. Uno va a Europa y ve deficiencias en ciertos campos. Nosotros que tenemos acceso con los amigos del Real Madrid, con Paul Burgess y demás, son otro mundo, pero haciendo un análisis nosotros no estamos tan lejos de una realidad que económicamente hablando son dos mundos diferentes. Allá gastan millones de euros anuales en mantenimiento de campos y aquí pues se hacen las inversiones y se manejan bien los campos.
Al final de cuentas es bueno para mejorar uno, bueno porque mejora el fútbol nacional, pero también es la crítica injusta porque no se ve el esfuerzo que se hace.
Usted prende la televisión y ve la Champions y los terrenos de Italia están en pésimas condiciones, el del Bayern está mal, o Wembley que tuvo conciertos, boxeo y un montón de partidos más de NFL; la cancha quedó despedazada porque no hubo tiempo de recuperación.
Los estándares en Costa Rica se han elevado producto de la misma competencia, pero es bueno para mejorar y creo que si no, nosotros no habríamos podido llegar a México.
Eso también le afecta a mucha gente, los celos profesionales empiezan a salir a flote y lo que toca es seguir adelante y ver qué hay nuevo.
— Usted es mediático por su personalidad o por la relación con la gente afín al equipo que sigue, y a nivel de redes sociales la gente lo buscaba mucho para preguntarle qué estaba pasando con el Azteca, ¿cómo manejó eso?
Es que uno tiene que entender cuál es la posición contractual de los trabajos y eso queda para uno también saber que a veces hay cosas que se pueden decir y a veces hay cosas que no se tienen que decir y punto, así lo llamen a uno de 20 periódicos y 30 televisoras.
Hay temas contractuales que van más allá de si puse un tuit o no. En las redes sociales cada quien pone lo que quiere, cada quien escribe lo que quiere. En las redes sociales uno no sabe si quien escribe es buena o mala persona y también hay gente a la que uno le cae mal porque genera anticuerpos en seguidores de otros equipos que no es el de uno, independientemente de si ven la cancha bonita o no.
— ¿En Europa también hay preocupación por cosas sobre la marcha que les suceden a las canchas o es que nosotros creemos que las cosas ocurren de este lado del mundo nada más?
La semana pasada estuvimos una semana por España con los amigos del Real Madrid, tenemos una muy buena relación y yo creo que inclusive hasta eso genera celos profesionales porque tenemos una apertura y acceso con ellos. Estuvimos en reuniones con productores del césped de España y yo creo que se hace más mediático el error que la virtud.
Y lo del serruchapisos es el pan de cada día acá, pero las cosas también pasan en Europa.
Estuve en Valdebebas (centro de entrenamiento del Real Madrid) y ahí les preocupa que las áreas se dañen porque es la zona donde la tracción del portero es mucho más y uno pone los pies en la tierra y dice que tampoco es que lo estamos haciendo mal, si esos problemas se dan allá.
Hay muchas situaciones que difieren de un montón de cosas. El Bernabéu solo recibe el partido y punto y a veces tiene partido cada 15 días. Ahora con el parón de la FIFA tenían casi un mes sin juego allá. Acá, a veces por infraestructura los equipos entrenan en el estadio, porque no hay esa cultura para decir que el estadio es solo para los 90 minutos del juego.
Si van a la cancha de entrenamiento ven otras situaciones. En Argentina vi los campos de entrenamiento y aquí estamos muy bien.
Pero como sabemos que es un tico el que hizo el Azteca entonces ahí si hay que estar encima y si no hubiese pasado nada, nadie hablaría del tico.
Vea hasta se dejaron decir que en el Azteca iba pasto natural porque no sirvió el híbrido y qué tiene, híbrido de los 20.000 metros cuadrados que hicimos.
— Cuando se suspendió el partido de la NFL en el Azteca, alguna gente lo quiso responsabilizar a usted, ¿qué piensa de eso?
Es falta de respeto de gente que quiere la nota amarillista, que vende likes, accesos a páginas web sin conocer cuál es la realidad. Nosotros sacamos un comunicado antes inclusive de la NFL, donde dejábamos claro que el mantenimiento diario del día a día no es cuestión de nosotros y por ejemplo, si ponen dos, cinco o diez conciertos nosotros no tenemos vela en ese entierro.
No tenemos decisión sobre eso y si son cosas que se indagan bien, verán que el San Mamés tuvo un concierto el 2 de noviembre, terminó, levantaron la cancha y después del parón de la fecha FIFA jugaron en una cancha totalmente nueva, pero yo no vi notas diciendo que pasó eso, que cambiaron esa cancha por un concierto.
El Wanda Metropolitano acaba de estrenar la gramilla, ahí estuvimos, no estaba en buenas condiciones y la cambiaron. Son cosas que a nivel mundial se realizan como el pan de cada día y aquí con la intención de perjudicar se desvían del tema.
En Costa Rica tenemos un muy buen nivel en cuanto a canchas y si la gente supiera que lo que ve en México y Argentina por la televisión en los estadios no es lo que ve en los campos de entrenamiento, creo que estaríamos más satisfechos de lo que tenemos los ticos.
— ¿Qué sigue ahora?
Ahora andábamos capacitándonos un poco, viendo qué nuevo hay. Traemos unos implementos para medición del rodamiento del balón, para medición del impacto en la compactación del terreno de juego, para medir más profesional el corte del pasto, estuvimos con la gente de la Liga Española, viendo cuáles parámetros utilizan, cuánto es la dureza que permiten en un estadio y cuánto no es y ver si implantamos lo mismo en los campos que mantenemos, con esas mismas reglas y parámetros para ver.
En los campos que mantenemos acá hemos logrado el verde que nosotros queremos, pero pretendemos ir más allá y dar un estándar muy alto en cuanto a resistencia y rodamiento del balón, saber que la bola rueda bien y demás, ya con algo más específico.
— ¿Esas novedades las comenzará a implementar en las canchas de Liga Deportiva Alajuelense y el Proyecto Gol?
Correcto, de momento la Liga y Proyecto Gol son los que se verán beneficiados con todos estos nuevos implementos que estamos trayendo en cuanto a la medición y a intentar que seamos más profesionales, que el campo mejore más y estamos en contactos para ver cómo reducimos la huella ambiental con respecto a los productos y a las máquinas que se usan.
Desde el martes empezamos a hacer ciertos test en el Morera Soto y en la Federación estuvimos revisando, porque para llegar a los parámetros de la Liga Española hay que ver cómo está el campo hoy para llegar a esos estándares.
— Una inquietud de la gente es que en los juegos siempre hay algo que se levanta en el Morera y hasta se ve en las mismas canchas de Europa, pero ¿qué es eso?
Es pasto. Es que esa es la diferencia entre el sintético y lo natural. Del sintético no se desprende nada y a veces lo ven como un problema. Esa es la fuerza del jugador que al final cuando ya llega a una fuerza máxima desprende el pasto. En el sintético, cuando esa fuerza máxima llega a su punto no desprende y a veces hay lesiones, pero no rompe el pasto.
Todo va con el clima, son cosas que se ven solo estando ahí. Hace 15 días tuvimos partido, no llovió en el juego, pero sí llovió cuatro horas antes muy fuerte y el día anterior llovió fuerte. La humedad en el campo se eleva y hace la superficie más suave y son condiciones que cambian.
Ahora cuando llueve, llueve mucho, cuando hace calor, hace mucho calor, o mucho viento. Los impactos climáticos en el mundo afectan también un campo de juego.
La vez pasada jugó la Liga a las 11 a. m. y a las 4 p. m. jugó Pérez Zeledón sin ningún problema, que es parte de los beneficios que da el híbrido.
Estamos en transición y ahora tenemos que empezar a regular el agua por medio de los sistemas de riego, ya no mediante la lluvia que no podemos controlar.
Es normal, el pasto se va a desprender en cualquier lado.
