Inglaterra (AP). Hace un año, mucha gente sentía lástima por Roger Federer.
Le enviaban cartas para desearle suerte o, aunque sea difícil de creer, con consejos sobre cómo jugar al tenis. Le ofrecían ideas sobre cómo superar un supuesto bajón en su desempeño o cómo derrotar a Rafael Nadal.
La gente se apresura a decir, oh, estás en picada, dijo Federer el sábado. Espero que estos últimos meses les abran los ojos.
Miren ahora a Federer.
Cuando entre a la Cancha Central el domingo para enfrentar a Andy Roddick en la final de Wimbledon, Federer buscará su 15to título de Grand Slam, para romper un récord que comparte con Pete Sampras.
Otras metas que puede alcanzar:
_un sexto título en Wimbledon;
_la oportunidad de ser apenas el tercer hombre en los 40 últimos años que gana el Abierto de Francia y Wimbledon en la misma temporada;
_volver al primer lugar del ranking mundial, un puesto que cedió ante Nadal el año pasado, un mes y medio después de perder contra el español en una épica final en el All England Club.
Obviamente, no hay suficientes palabras para describir lo que ha sido la carrera de Roger hasta ahora, dijo Roddick, quien busca su segundo título de un major.
Roddick ganó el Abierto de Estados Unidos de 2003, pero es uno de muchos talentosos tenistas que tuvieron la mala suerte de ser contemporáneos de Federer: el estadounidense cumplirá 27 años en agosto, unas pocas semanas después que Federer cumpla 28.
Federer tiene un dominio absoluto sobre Roddick, con 18 triunfos en sus 20 enfrentamientos, incluyendo siete en torneos de Grand Slam.
El suizo derrotó a Roddick en las finales de Wimbledon de 2004 y 2005, y en las semifinales de 2003. Federer también le ganó en la final del Abierto de Estados Unidos de 2006.
El tiene mucha energía. Es muy gracioso, muy agradable, comentó Federer. Como jugador es conocido por su increíble saque e intensidad y su espíritu de lucha. Nunca se rinde. No ha sido fácil para él en los últimos años, los estadounidenses tienen muchas expectativas, fueron malacostumbrados con Sampras y Agassi y todos los que los precedieron.
Para ellos (los estadounidenses) no es suficiente con tener a alguien entre los 10 primeros, quieren que sean número uno. Es bueno verlo de vuelta en una final.
Roddick se siente de la misma manera.
Uno no quiere llegar a la final de Wimbledon por accidente, comentó Roddick. Ciertamente es un proceso, y probablemente es uno proceso más largo de lo que me hubiera gustado.
Roddick consiguió 43 aces en su triunfo sobre el australiano Lleyton Hewitt en los cuartos de final, y luego despachó al británico Andy Murray en las semifinales.
Siempre he dicho que su saque es lo que lo hace tan peligroso, sin importar la superficie en la que juegue, comentó Federer. No sólo tiene un gran primer saque, pero probablemente tiene le mejor segundo saque en el tenis.
El hombre al que Federer derrotó en las semifinales, Tommy Haas, no cree que Roddick tenga muchas posibilidades de superar al suizo.
No le doy muchas posibilidades de ganarle a Roger en la final. Quizás un set, esa es mi opinión, dijo el alemán.