Cartago. Genio y figura. Juan Luis Hernández Fuertes no pierde su talante, aunque la víspera saliera por la puerta chica en un juicio que interpuso ante el productor Parmenio Medina.
Ayer dejó el saco y la corbata verde que lució en el tribunal y se enfundó en el buzo azul para dirigir la práctica en el Fello Meza.
Sobresalió por la generosidad. Permitió que la prensa observara el entrenamiento brumoso con miras al crucial partido del domingo ante Saprissa y fue espléndido en declaraciones.
-Juan Luis, dicen que Cartaginés está crecido.
-Está tranquilo, que no es lo mismo. Aquí nadie celebra, porque no hay motivo.
-Su equipo sorprendió contra los manudos. ¿Cuál es el techo?
-El límite de la capacidad de los jugadores. Hay futbolistas que no lo dan todo, que se guardan mucho y otros que son capaces de jugar al límite.
-Los que están ahora con Cartaginés, ¿juegan al límite?
-Sí, ya lo hicieron ante Alajuelense. Es que hemos aprendido del sufrimiento, pues esta temporada no ha sido nada fácil. Podemos decir que ya nos acostumbramos a llevar palo.
-¿Muy sufrido?
-Al inicio de temporada nos dejaron sin Jéwisson Bennett. Luego, se rescindieron los contratos con Miguel Davis, Marco Lima, Carlos Ulate, Hermidio Barrantes, Heiner Segura y Norman Gómez. Hemos tenido 20 expulsiones, Heriberto Quirós estuvo mes y medio lesionado. Hemos vivido todas las penurias que se puedan sufrir en el futbol.
"Por ello, lo que nos presente el rival no puede ser más difícil que nuestra propia realidad."
-Pero, este equipo lo hizo usted a su gusto.
-(Sonríe, hace una pausa y continúa con su inconfundible acento español). Lo hice yo, pero luego de que solicité 40 jugadores y no me dieron los 16 primeros de la lista.
-Luego de rescindir los contratos con algunos jugadores, Cartaginés quedó en gran desventaja.
-Claro. La planilla actual es de 24 futbolistas, de los cuales 9 son menores de 20 años y no tenían ni un minuto en Primera División, como Fausto González (segundo portero), Oscar Quirós (tercer guardameta), Juan José Fedullo, José Brenes, Erick Jiménez, Róbert Madrigal, Jairo Mejía y Claudio Guzmán.
-Una planilla limitada en experiencia.
-Imagínese que cuando enfrentábamos a Alajuelense en la anterior serie, se decía que cinco jugadores manudos buscaban su quinto título en la década. Nosotros solo tenemos dos que han sido una vez campeones: Mullins y Peynado, ambos con Alajuelense.
-¿Pesará esto ante Saprissa?
-El equipo tiene la convicción y la esperanza de que en el futbol lo físico y lo táctico son partes importantes, pero que hay otras variables y que si se manejan bien al final, la supuesta ventaja individual del rival puede ser superada.
-Hablemos de la táctica fija. Saprissa exhibió ocho variantes, Cartaginés cuatro.
-Está claro que Saprissa dispone de especialistas y nosotros no, por lo que tenemos que fabricarlos. Alejandro Larrea, Roy Myers, Oscar Ramírez, Alejandro Sequeira, Víctor Cordero o Adrían Mahía son especialistas en jugadas planificadas. Si alguien ve un especialista en Cartaginés, que me lo diga porque yo no lo veo.
-Entonces, ¿qué tipo de jugadores tiene Cartaginés?
-Aquellos que manejan los mecanismos necesarios para afrontar los partidos. Por ejemplo, Alajuelense no nos hizo daño con la táctica fija.
-Podemos decir que Saprissa tiene especialistas y Cartaginés obreros?
-Podemos decirlo. Por supuesto que es más bonito trabajar con ingenieros, porque lo que no sabe el técnico, ellos lo resuelven en la gramilla. Pero el mérito está en ganar la partida sin tener a mano todas las cartas de triunfo.
-Dos bajas importantes para el domingo, pero dos altas también básicas.
-No hay que engañarse. Los suspendidos Fránder Segura y Mauricio Sánchez sustentan la columna vertebral del equipo.
-Aparece de nuevo la desventaja.
-Yo no puedo apostar a la experiencia, pues siempre perdería. Me queda, entonces, la esperanza en el equipo, en el engranaje que pueda construir para enfrentar a Saprissa. Pero eso no me preocupa tanto como las situaciones extradeportivas.
-¿Cuáles?
-Dos en particular. En el estadio Ricardo Saprissa, la banca del equipo visitante está lejos del centro del terreno de juego, lo cual es antirreglamentario y Saprissa se comprometió -el martes anterior en el Comité de Competición- ponerlo a la misma distancia que el de casa. Si esto no es así, Cartaginés no jugará.
"Además, me inquieta que el técnico morado, Alexandre Guimaraes, diga a la prensa cuál árbitro tiene que nombrarse y cómo debe dirigir. Eso es preocupante porque se puede interpretar de muchas formas, por más inocente que uno sea.