El defensor Francisco Calvo fue silbado durante el partido que Costa Rica empató 0-0 frente a Honduras y fue uno de los jugadores más señalados por la eliminación de la Tricolor de la Copa del Mundo 2026.
El zaguero, al final del compromiso, habló ante la prensa con el rostro desencajado por la tristeza de quedar fuera de un Mundial donde Costa Rica era uno de los favoritos.
“Es muy duro. Esta era mi tercera eliminatoria y es la primera vez que me sucede esto (quedar eliminado). Evidentemente es un trago muy amargo para el fútbol de Costa Rica. Estuvimos a un bendito gol de meternos al repechaje, lo sabíamos, lo intentamos…”, comentó en medio de la decepción.
Francisco admitió que la representación patria cometió errores en los seis partidos de la cuadrangular y que eso pesó al final.
“Lo intentamos hasta el final. Ahora debemos pasar este trago amargo y pedirle una disculpa a la afición y al país. Lo intentamos, Honduras vino, se encerró y nos costó romper el bloque cerrado. Lo intentamos con Kendall (Waston), pero no se pudo. Debemos poner las barbas en remojo y ahora se le debe dar una nueva cara al fútbol de Costa Rica”, manifestó Calvo en medio de la tristeza.
En cuanto a los silbidos, el defensor costarricense afirmó que para él no son importantes, pues siempre lo dio todo en la cancha a pesar de las críticas.
“A mí es la primera vez que me chiflan, no lo había notado. Juego por mi país, nunca me he negado y siempre he dado la cara. Que la gente se meta conmigo no me importa. A los aficionados les debo respeto, pero lo más importante es mi familia y aquí estaré hasta que sea”, finalizó Calvo.

