EscucharMadrid, 1 nov (EFE).- Ronaldo y el estado de su cuello ha provocado un nuevo problema en el seno del Real Madrid, en un cruce de declaraciones de los protagonistas, tras una nueva suplencia del delantero brasileño en una semana en la que se ha desatado la primera polémica de la temporada con Antonio Cassano.
Tres días después de los gritos de Cassano a Fabio Capello en los vestuarios del Nastic de Tarragona que provocaron una multa y el castigo de entrenarse apartado de sus compañeros, Ronaldo ha protagonizado una escena que provocó un malentendido.
Capello meditaba conceder la titularidad al delantero brasileño ante el Steaua, pero sus dudas se esclarecieron cuando Ronaldo sufría un golpe con Alvaro Mejía en el partido de entrenamiento de la previa y hoy se levantaba mal.
Fue la versión a la que se agarraron el presidente Ramón Calderón, Pedja Mijatovic, director deportivo, y el técnico Capello. "Tiene un problema en el cuello que le impide jugar de inicio", admitió Mijatovic en los minutos previos al encuentro.
Pero Ronaldo recibía el calor del público del Bernabéu cuando saltaba a calentar sin síntomas de molestia nada más iniciarse la segunda mitad y en cada jugada que protagonizaba en los diecisiete minutos que estuvo sobre el césped.
Visiblemente molesto nada más concluir el partido porque esperaba ser titular, hablaba con brevedad pero con rotundidad en los micrófonos de Canal Plus: "Si no he sido titular no ha sido por el cuello; si no, no habría jugado ningún minuto. Preguntad al entrenador".
Ante este panorama Capello explicó en rueda de prensa todo lo ocurrido al detalle, con una clara intención de no dejar lugar a la duda para zanjar el problema que ya había estallado.
"La verdad es que ayer tuvo un problema en el cuello durante el partido que hicimos. Esta mañana cuando se ha despertado estaba totalmente bloqueado, le han hecho curas los doctores y fisios, no estaba seguro de que pudiese jugar y esta mañana hemos llamado a Javi García", comentó.
"Después de la merienda a las seis de la tarde le pregunté cómo estaba y me dijo que tenía dolor pero podía estar en el partido. No lo puse de inicio y le puse en el final", explicó Capello.
El cruce de declaraciones cerró un día en el que el Real Madrid logró la clasificación matemática a los octavos de final de la Liga de Campeones y vivió la segunda situación problemática en la misma semana. EFE
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