
Guadalajara y Buenos Aires. EFE Chivas de Guadalajara le dio anoche un baile al Boca Juniors con una goleada 4-0 en el estadio Jalisco, en el juego de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores.
La paliza sobrepasó las expectativas del dueño de Chivas, Jorge Vergara (quien también es propietario de Saprissa, campeón de Concacaf), y que desde su palco vio cómo su equipo anotó más de los tres goles que había pronosticado.
En el otro juego de la jornada, el River Plate sacó un valioso empate de visita ante el Bánfield.
Paliza. El primer tiempo en el Jalisco fue muy disputado y Guadalajara tuvo su recompensa con el gol de Johhny García (minuto 45). La segunda parte fue rojiblanca por completo y los tres goles de Omar Bravo (55'), Juan Pablo Alfaro (60') y Adolfo Bautista (65') lo sellaron.
Los argentinos hicieron su partido y no renunciaron al ataque, pero fueron superados, arrinconados y se excedieron en las patadas.
Si bien García abrió el marcador, fue el segundo gol local el que descompuso a Boca.
La tercera anotación consolidó un dominio por el que Chivas trabajó todo el tiempo y el cuarto tanto ya fue en plena euforia mexicana.
El partido de vuelta se jugará el próximo 15 de mayo en el estadio del Boca Juniors en Buenos Aires.
Mientras tanto, River Plate logró un empate a uno ante el Banfield, en partido disputado con más nervios que sutilezas.
Marcelo Gallardo abrió el marcador para el River a los 9 minutos y Daniel Bilos igualó al 55'.
El empate favorece al River Plate si el encuentro de vuelta finaliza igualado a cero, porque en ese caso tiene doble valor el de ayer.
La sangre caliente y el campo mojado por la lluvia atentó contra el juego, plagado de infracciones. Los roces e insultos y provocaciones entre varios jugadores dejaron cuentas pendientes a la vuelta.