Santiago y Bogotá. Chile dio anoche un golpe de cátedra a la historia futbolística al vencer por tres goles a cero a Brasil, su bestia negra, en un partido disputado en Santiago por la sétima jornada de las eliminatorias suramericanas para el Mundial 2002.
Ambos países se habían enfrentado antes 55 veces, con 38 triunfos para Brasil, y solo 6 de los chilenos.
Pero ayer Chile dio un mentís a las estadísticas y dejó claro que es un equipo peligroso en casa, lo que ya había puesto en evidencia al derrotar a Paraguay (3-1).
Con este resultado Chile sumó 10 puntos mientras Brasil se quedó con 11.
Chile estableció el ritmo del partido en los primeros minutos ante el desconcierto de un Brasil que fue muy cauto.
Esto permitió que Salas se paseara tanto por el lateral izquierdo como por el derecho, buscando habilitar a sus compañeros y transformándose de paso en la figura del cotejo.
A los 8 minutos una falta de Assunzao sacó al contención Marcos Villaseca del partido.
Esta modificación obligó a Estay a retrasarse, dejando a Pizarro como único volante de creación, lo que dio aún más dinamismo al juego chileno.
Este esfuerzo fue premiado a los 25 minutos con el gol de Estay tras una gran jugada de Salas, que le limpió el camino frente al arco.
Posteriormente, a los 44 minutos Estay robó el balón al capitán brasileño Antonio Carlos y habilitó al capitán chileno Iván Zamorano, quien no desperdició la oportunidad e impulsó la pelota suavemente para anidarla en la red.
En la segunda etapa, Brasil, en tanto, intentó modificar su funcionamiento con la entrada de Djalminha en reemplazo de Assunzao y de Luizao por Amoroso.
A los 57 minutos, Nelson Tapia salió al achique y contuvo la más clara ocasión de gol de los tetracampeones en los pies de Rivaldo.
La inclusión de Marques a los 61 minutos contribuyó a dar mayor poder ofensivo a los visitantes, dejando a Luizao y Marques en la delantera y a Djalmina como enganche, con lo que se crearon mayores oportunidades de convertir.
Sin embargo, a los 74 minutos Salas coronó su excelente actuación con un gol de antología: tras centro de Pizarro amortiguó de pecho y con una volea con pierna zurda marcó el tres a cero definitivo que selló el marcador.
Fiesta colombiana
En Bogotá, la selección colombiana a Uruguay (1-0), reivindicándose así con una afición que festejó hasta el cansancio el gol que marcó Jairo Castillo en el minuto 72.
El gol de la victoria que marcó Castillo, tras un remate con pierna zurda, dejó al equipo colombiano con 12 puntos, para ocupar transitoriamente la segunda casilla en la tabla general de posiciones.
Desde el inicio del compromiso, el equipo local mostró mejor manejo en el terreno de juego y, durante los primeros 45 minutos, fue poco el espacio que dejó a una selección uruguaya imprecisa, con equivocaciones en la entrega del balón.
En la etapa complementaria, Uruguay salió presionando al rival, mas los colombianos lograron quitarle el balón y, demostrando un excelente juego colectivo, volvieron a hacer vibrar de emoción a los 25.000 aficionados que llegaron al estadio El Campín de Bogotá.
Hoy se completa la sétima fecha de esta eliminatoria: Ecuador-Bolivia (3 p. m.), Argentina-Paraguay (6 p. m.) y Perú-Venezuela (8 p. m.).