
Santo Domingo. Basta con echar un vistazo al cuadro de medallas de los Juegos Panamericanos para comprobar que Centroamérica es la zona con el peor desempeño deportivo de todo el continente.
Que Suramérica o los monstruos del norte superen a los países de la región no es noticia. Pero hasta pequeñas islas del Caribe, como Bermuda, Bahamas y Granada, empatan o hasta mejoran los resultados de Centroamérica en preseas.
Incluso Haití, el país más pobre de América, lleva una medalla de bronce, igual que Costa Rica y mejor que El Salvador, Nicaragua y Honduras.
Guatemala encabeza el medallero del istmo, con una de plata y dos de bronce. Tienen asegurada otra presea en bádmington.
Costa Rica, Panamá y Honduras tienen sendos bronces. Los demás están en blanco.
En la mayoría de los casos, los malos resultados obedecen a problemas para financiar el deporte y desarrollar programas de largo plazo.
Según un sondeo entre miembros de delegaciones centroamericanas, Nicaragua, Panamá, Costa Rica y un poco Honduras pertenecen a este grupo que casi no invierte.
Luego vienen los “ricos”: Guatemala y El Salvador, con verdadera planificación y una fuerte chequera respaldando la preparación de los atletas.
El Comité Olímpico Guatemalteco, por ejemplo, recibe más de $1,5 millones anualmente (¢600 millones), mientras que en El Salvador el aporte estatal para el deporte (tanto masivo como de alto rendimiento) es de $12 millones anuales (¢4.800 millones).
En Costa Rica, mientras tanto, la participación de los 51 atletas ticos se garantizó solo 15 días antes de los Juegos, con una partida por ¢90 millones del Instituto del Deporte (Icoder).
Resultados
Aunque sin ganar oro todavía, Guatemala cumple un papel aceptable, que justifica su millonaria inversión.
El Salvador, por el contrario, es la gran decepción del istmo, con cero medallas y una larga lista de decepciones.
El gerente del Comité Olímpico Salvadoreño, Rigoberto Hernández, reconoció ayer que la cosecha será menor de lo esperado. “Confiábamos ganar al menos dos medallas en halterofilia, pero ya se nos fue la primera. Bueno, también algunos atletas lograron mejorar sus marcas y eso nos tiene satisfecho”, dijo con aire conformista.
Por su parte, Luis Alberto Soto, miembro de la Comisión Técnica del Comité Olímpico Nacional de Costa Rica, aseguró que, pese la escasez de recursos, se pudo enviar a atletas de triatlón, taekwondo y ciclismo a entrenarse y competir en el exterior para estos Juegos.
La brecha a favor de guatemaltecos y salvadoreños se evidencia también en el plano de los incentivos: los chapines reciben de su dirigencia $25.000 por una medalla de oro (¢10 millones), y los salvadoreños $18.000 (¢7,2 millones), gracias al aporte de la empresa privada. También hay sumas menores para las otras medallas.
Pero ni los premios han logrado elevar el número de medallas centroamericanas.