
Alajuela. Desde hace cuatro años, la Liga Deportiva Alajuelense hizo de ganar el título una buena costumbre.
A las puertas de la nueva temporada, los manudos tienen las cartas necesarias para reiterarse en el hábito, cosechar el pentacampeonato e implantar la segunda cadena de títulos más larga del futbol tico..., para mortificación de los seguidores del Deportivo Saprissa, que posee el récord de seis cetros al hilo.
Con el destino manifiesto de los equipos grandes y la bonanza del tetracampeonato –obtenido con enorme solvencia–, a los liguistas les cuesta imaginarse en un lugar diferente del primero.
El optimismo para los manudos se apoya en la solidez y equilibrio de cada línea; la experiencia y continuidad de su base futbolística; la firmeza y sapiencia de la estructura que rige los destinos del club.
Los tetracampeones tienen el colmillo suficiente para sortear las presiones de la feligresía manuda, que sueña con ese inédito quinto cetro consecutivo.
“No hay que obsesionarse con el tema del pentacampeonato”, advirtió el director técnico, Juan Carlos Oblitas.
Sin embargo, el asunto está muy lejos de “coser y cantar”. Los equipos “grandes” se reforzaron en pos de quebrar el ritmo manudo e impedirle ese quinto cetro.
Ojo con esto
Si parafraseamos la famosa expresión de Los Tres Mosqueteros , el torneo de este año será de uno contra todos y todos contra uno.
Además, la Liga estrena técnico –el peruano Oblitas–, en proceso de conocer el entorno del futbol tico y a su equipo.
En este último punto tiene un agravante: la cantidad de seleccionados rojinegros (nueve en la Copa de Oro, seis para la gira a Austria), quienes cada vez que son llamados a la Tricolor cortan su continuidad de trabajo.
Tal situación no es desconocida en las tiendas erizas y una vez más deberán apechugar con ella. Por lo pronto, Oblitas los confirmó como titulares para el arranque de la temporada como premio a su estatus.
Además, para un quinto campeonato al hilo, la Liga debe vencerse a sí misma.
Pasa en todos los deportes y el futbol no es la excepción: cuando se llega a la cúspide se pierde el “hambre del retador”.
Si los tetracampeones mantienen esa ambición, se reafirmarán como el equipo número al título. A la hora de hacer cuentas, los pros suman más que los contras para Alajuelense.
Una vez más se debe apelar al símil con la Fórmula Uno: la Liga parte en la pole position para esta nueva temporada.