"Nosotros tuvimos una pelea, como cualquier pareja normal, y terminamos todo. Ahora el balón debe rodar hacia adelante", manifestó el astro del Inter de Milán a un noticiero de la Rede Globo TV en el concesionario de Sao Paulo, donde compró el Ferrari F355-F1.
El jugador de 22 años dijo que evitaba hablar "sobre el asunto porque, la verdad, es que no importa" y dijo tajantemente no creer que su ex novia hubiese declarado en Río de Janeiro a una revista que durante su estancia en Milán ella lavaba pisos, arreglaba la casa y cocinaba.
El atacante, amante de los coches deportivos de lujo, tiene un Ferrari similar en Italia, pero no escondió su emoción por el nuevo automóvil de su flota. "No es lo mismo tener un Ferrari en Italia que tenerlo en Brasil", declaró.
Ronaldo, que tras la ruptura de la relación con Werner se ha convertido en uno de los solteros más codiciados del país, desembolsó 320.000 dólares por el vehículo y celebró con champaña en la concesionaria su nueva compra.
El jugador cumple en Río de Janeiro un tratamiento clínico para superar la tendinitis que le impidió participar en los partidos amistosos de la selección contra la de Holanda (los días 5 y 8 de junio) y estar en condiciones físicas de disputar la Copa América, que se disputará en Paraguay del 29 de junio al 18 de julio.