Juan Vázquez de Coronado colonizó Costa Rica de 1562 hasta su muerte en 1565, consecuencia de un naufragio. Se casó con Isabel Arias Dávila, cuya familia había sido perseguida por la Inquisición por su origen judío. De esta unión descienden gran cantidad de los costarricenses del Valle Central, incluyendo más de 20 expresidentes.
Fue una excepción entre muchos conquistadores europeos. Su pensamiento estuvo influenciado por un espíritu humanista que sería antítesis del pensamiento brutal y despiadado del conquistador e inquisidor de la época. Creía en la igualdad entre los hombres, ya fueran españoles o indígenas. En lugar de estimular las rivalidades entre los distintos pueblos nativos, para gobernarlos más fácilmente, se preocupaba por conciliar sus diferencias y enemistades. Concebía la conquista como un proceso armonioso, democrático y espiritual.
Esfuerzo por entender. Para comprender este o cualquier otro momento histórico, se debe hacer un esfuerzo por entender el pensamiento de la época y la realidad económica, que se afectan mutuamente. La colonización de América tiene rasgos eminentemente capitalistas. Desde la primera empresa de Colón, se necesitaba financiamiento y los que las financiaban lo hacían para obtener ganancia. Muchas tuvieron éxito, por lo que gran cantidad de inversionistas entraron en una nueva ola de empresas conquistadoras, se estimuló el sistema económico y se originó un gran auge. Pero, a medida que pasaba el tiempo, muchas empresas estaban basadas más en falsas creencias y actitudes equivocadas que en la realidad económica, por lo que terminaron en fracaso total.
Así, la realidad económica, social y geográfica de Costa Rica no permitió que tuvieran éxito las empresas de conquistadores que creyeron que bastaba con traer unos pocos soldados, que venían con actitudes de doblegar a la fuerza y con violencia a los indígenas. La pobreza de Costa Rica no permitió que se financiaran ejércitos. La labor de Vázquez de Coronado fue esencialmente diferente de la de otros conquistadores y tuvo éxito en la pacificación de los indios y en alcanzar la primera visión integral de Costa Rica, por ello recibió honores y títulos. Sembró la semilla en una tierra y circunstancias fértiles para el desarrollo de un espíritu democrático, pacífico, tolerante e igualitario, del que disfrutaron nuestros abuelos.
Historia de éxito. Para entender el origen de la manera de ser, valores y tradiciones de un pueblo, debemos conocer, necesariamente, las actitudes y manera de pensar que tuvieron éxito en el pasado, porque son las que sobrevivieron y crecieron. Además, si enseñamos la historia de los hombres que tuvieron éxito, enseñamos a construir, porque ese éxito fue en la Colonia y sigue siendo hoy un buen ejemplo a seguir para los costarricenses.
Menospreciar a los antepasados y empeñarse en no ver las diferencias históricas del pueblo costarricense, tal como hace gran cantidad de educadores, es una manera de mancillar nuestro pueblo. Debe comprenderse que las nuevas ideologías, como las que vienen con la globalización y el libre comercio, son una especie de injertos que solo darán buenos frutos si el árbol sobre el que se injerta, nuestras raíces e idiosincrasia, no se sigue debilitando.