En agosto del 2008, cuando Brian Chesk y Joe Gebbia crearon la empresa Airbnb, Inc. estaban seguros de que revolucionarían la industria del hospedaje. Y así lo hicieron, claro está, a un alto costo para los gobiernos en virtud de la elusión y evasión de impuestos que ello ha generado en el mundo.
De acuerdo con el procurador general del estado de Nueva York, el 70% de los “establecimientos” que se encuentran registrados en este motor de búsqueda, localizados en esa ciudad evaden el pago de los impuestos federales y estatales así como los impuestos específicos para la industria hotelera.
Por ello, en California, primordialmente en los condados de Los Ángeles y San Francisco, las autoridades de los gobiernos locales y la Internal Revenue Services han instado a las empresas relacionadas con este “negocio” a entregar sus bases de datos de los propietarios registrados en estas comunidades con el fin de cotejar el pago de todos los impuestos o, de lo contrario, la responsabilidad tributaria recaería en ellos. Esto llevó a la decisión de Airbnb.com de no hacer comercio en el condado de San Francisco, curiosamente, lugar donde se gestó el “negocio”.
Millones sin tributar. En Costa Rica no hemos escapado a este fenómeno. Así, por ejemplo, en tan solo cinco de los más importantes buscadores (airbnb.com, homeaway.com, windu.com, roomorama.com y vrbo.com) contamos con más de 7.991 “establecimientos” de este tipo. En términos prácticos, esto equivale a casi el doble de la oferta hotelera formal de todo San José o, lo que es más preocupante, al 17% de la oferta hotelera nacional.
Si bien no existen estudios concretos en nuestro país, si tan solo utilizamos el parámetro establecido para la ciudad de Nueva York, junto con la ocupación promedio anual del año pasado (55%) a una tarifa promedio anual ($105), la evasión solo del impuesto sobre las ventas sería de más de ¢11.824 millones.
En cuanto al impuesto sobre la renta, la evasión podría representar ¢27.287 millones y cerca de ¢1.364 millones en impuestos municipales.
En total, significa un monto cercano a los ¢40.475 millones de colones, que equivalen al 18% del presupuesto del
Ministerio de Seguridad Pública. Mejorar la recaudación. En materia de turismo, nuevos impuestos vendrían a encarecer el ya oneroso costo del país cuando la posibilidad de incrementar los ingresos están puestos a tan solo un clic de Hacienda.
Ciertamente, hemos encontrado un sincero compromiso de Hacienda para mejorar la recaudación en este nuevo nicho, pero también se requiera la complicidad de los usuarios de estos servicios, quienes deben comprender que evadir el pago de impuestos en nada fomenta la economía nacional y nos quita el derecho a seguir reclamando mejoras al sistema.
El autor es presidente de la Cámara Costarricense de Hoteles.