Tengo 75 años, dirijo tres talleres de escritura creativa para adultos mayores (somos cerca de 50), he publicado cerca de 15 libros y, aparte de todas mis actividades diarias, por estar en el rango de los “cofaleados”, debo irme para la casa con la única misión de esperar la muerte. Le recuerdo al presidente de la República que somos cerca de 400.000 personas mayores. ¿Piensa usted lo mismo de Biden, de 82 años; de Trump, quien asumirá la presidencia de EE. UU. a los 78; o de Lula, que tiene 79, y muchos que, como Arias, todavía ocupan puestos políticos en el mundo? De seguro, usted habría “cofaleado” a Moisés, Sócrates, san Agustín, Constantino Láscaris y la madre Teresa. Desconozco su edad, pero créame, si llegara con sabiduría y bondad, siempre será bienvenido a estos años maravillosos de la tercera edad.
Mario Valverde Montoya, San Rafael de Montes de Oca
El ejemplo de Mujica
José Pepe Mujica, expresidente de Uruguay, líder político en Latinoamérica —en el más amplio sentido de la palabra—, mentor y formador, debido a un cáncer, a sus 89 años, está agonizando e, incluso, prepara su propio entierro en el patio de su casa. Con la sabiduría que lo caracteriza, se despide de sus compatriotas con estas palabras: “Es fácil tener respeto para los que piensan parecido a uno, pero hay que aprender que el fundamento de la democracia es el respeto a quienes piensan distinto”. Hay un empleado público en Zapote que pronto dejará de serlo. Le caería muy bien aprender de Mujica e interiorizar esas palabras.
Isidro González Agüero, Santa Ana
Trato desigual
La burla de los bancos y otras instituciones públicas de la Ley 7935 no tiene límites. El jueves, en las oficinas centrales del Banco de Costa Rica, una persona en silla de ruedas tuvo que esperar dos horas para que la atendieran. Intervine, y los oficiales me dijeron que ella estaba en la fila preferente y no podían hacer nada. En todos los bancos se colocó un rótulo para indicar el sitio de atención de las personas mayores y sillas, y asignaron un solo cajero. Con esto, se dan por satisfechos y creen cumplir la ley. Su actitud es discriminatoria, porque en las otras filas la espera es de media hora.
Es hora de que tengan sentido común, y ojalá la Defensoría de los Habitantes y las contralorías de servicios pongan fin a estos maltratos.
José Gerardo Umaña Sánchez, Desamparados
BCR y ciberseguridad
Hace más de una semana, el Banco de Costa Rica (BCR) respondió a mi carta sobre la creación de una clave dinámica para los sobres diciendo que van a analizarlo. Es el mismo mecanismo de Sinpe: el sistema, automáticamente, pide la clave dinámica. La mayoría de la gente usa los sobres porque cree erróneamente que nadie los puede tocar. Con solo hackear la cuenta, pasan como Pedro por su casa a los sobres. No entiendo qué debe analizar el BCR. Solo debe aplicar las normas de seguridad de Sinpe. ¿Será desidia de los funcionarios?
Glen Rodríguez Solís, Heredia
Intenciones políticas
No sé qué más prueba se necesita sobre las perversas y peligrosísimas intenciones de Rodrigo Chaves: el desmantelamiento de nuestra CCSS, el calamitoso estado de la educación, la negativa a financiar el OIJ y a la Fuerza Pública, la politización del sistema financiero nacional, el regalo de nuestras playas y áreas protegidas, y, lo último, la reincorporación de Marta Esquivel, quien tiene una investigación en curso, como ministra de Planificación. Para colmo, parece que pretende aspirar a una diputación para tratar de manipular lo que no pudo como presidente. Debemos frenar a Rodrigo Chaves y a sus seguidores antes de que haga más daño a nuestra patria y antes de que sea demasiado tarde.
Julio Vindas Rodríguez, San Pablo de Heredia
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