
Si usted es un usuario frecuente del servicio de taxis, tome en cuenta que este aumentará en un 3,35%.
El banderazo de salida y cada kilómetro adicional recorrido le costarán ¢20 adicionales.
En ambos casos la tarifa pasará de ¢530 a ¢550; esto, para los taxis tipo sedán de uso frecuente en la capital y las cabeceras de provincia.
De esta forma, un recorrido de 10 kilómetros, el equivalente a desplazarse desde el Colegio de Ingenieros en Curridabat hasta Cemaco en Pavas, aumentará en ¢200. Ese viaje subirá de ¢5.300 a ¢5.500.
Para los servicios en zonas rurales, el mayor incremento se da en la tarifa por espera, la cual pasará de ¢3.430 a ¢3.510.
En los carros adaptados para personas con discapacidad, el ajuste más significativo es en el cargo por demora (se aplica en presas) que aumentará de ¢5.350 a ¢5.600.
Las nuevas tarifas fueron aprobadas por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) y regirán el día de su publicación en el diario oficial
El ajuste es de tipo extraordinario y procura compensar el efecto de la inflación, modificaciones en el tipo de cambio, el salario del taxista y alzas en los combustibles.
Los servicios de taxi desde el aeropuerto Juan Santamaría también se incrementarán. El primer kilómetro pasará de ¢785 a ¢810 y el adicional subirá de ¢675 a ¢695.
El costo del peaje no está incluido en la tarifa; por lo tanto, corresponde al usuario pagarlo.