El Tribunal de Alzada del Partido Liberación Nacional (PLN) declaró con lugar un recurso de apelación interpuesto por la diputada Carolina Delgado, y anuló la sanción de ocho meses de suspensión que le impuso el Tribunal de Ética de la agrupación el pasado 7 de agosto.
El órgano partidario le había abierto a Delgado una investigación después de que la legisladora subió al podio junto con el presidente de la República, Rodrigo Chaves, en un acto público realizado el pasado 25 de julio en Nicoya, Guanacaste.
Un día después, el secretario general del PLN, Miguel Guillén, dijo que lo ocurrido en Nicoya con Carolina Delgado permitió al presidente Chaves insinuar que al PLN no le interesa el bienestar de los guanacastecos.
Además, Guillén dijo que había preocupación por “la aparente cercanía de la diputada con este gobierno”, lo que se sumó a la férrea oposición de Delgado a la línea de fracción, por ejemplo, cuando presentó 519 mociones al proyecto de ley contra el crimen organizado que Liberación apoyaba.
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La sanción impuesta a Delgado implicaba que, durante ocho meses, se le suspendería su militancia partidaria, por lo que no podría participar de las reuniones semanales de la bancada verdiblanca.
No obstante, la congresista planteó un recurso de apelación ante el Tribunal de Alzada, que este viernes 22 de marzo le dio la razón. Esa instancia corroboró que el Tribunal de Ética liberacionista incurrió en un mal procedimiento, ya que hubo un error material administrativo que se intentó subsanar con otra resolución, cuando lo correcto era anular ese procedimiento y comenzar otro.
Anteriormente, Delgado había presentado un recurso de ampara electoral, ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), órgano que también le dio la razón. Los magistrados encontraran defectos procesales. Esto provocó, además, que el PLN tuviera que pagarle los costos, daños y perjuicios causados.
“Se demuestra una vez más que el proceso llevado a cabo por el Tribunal de Ética no fue más que una mera persecución política en mi contra sin precedentes. Es mi sincero deseo que este proceso sirva como ejemplo para que, en nuestro partido, se sigan llevando a cabo todos los procesos de manera transparente y ética. Es esencial que se respeten los derechos fundamentales de todas las personas militantes”, declaró Carolina Delgado.
Por su parte, Miguel Guillén negó que la sanción fuera una persecución política, y criticó las 519 mociones presentadas por la diputada al proyecto contra el crimen organizado.
“Cuando se impide que un proyecto de alto interés público no se pueda discutir ni aprobar, como mínimo, es censurable. Era completamente razonable cuestionar la actitud y las actuaciones de doña Carolina. De ninguna forma esto representa persecución de ningún tipo; acudir a esos argumentos es apelar a una victimización que no tiene lugar”, respondió Guillén.

