Los nuevos diputados de la Asamblea Legislativa castigaron el informe que presentó el lunes, en el plenario, el presidente de la República, Carlos Alvarado.
Sin presencia del partido oficialista con el que llegó al Gobierno, las seis fracciones parlamentarias fueron implacables sobre las ausencias en el discurso del presidente, aunque reconocieron algunos puntos positivos de su gestión, sobre todo en cuanto a construcción de obra pública.
La jefa del futuro partido oficialista, Progreso Social Democrático (PSD), Pilar Cisneros, aseguró que el informe “básicamente no refleja la realidad”.
“¿Cómo va a decir que deja un país ordenado, económicamente? Perdón, ¿dónde está el orden? Un endeudamiento creciente, con una deuda pública casi del 70%”, aseguró.
Cisneros reconoció que al mandatario le tocó una muy difícil situación de desempleo, por la pandemia, pero que fue lo mismo para el resto de América Latina y que en el caso de Costa Rica es superior.
“Si vamos desgranando, en infraestructura le reconozco que avanzaron montones, pero a qué costo. ¿Cuánto costó Cochinilla, qué ha pasado realmente con las empresas que tenían que supervisar la calidad de las obras?”, apuntó.
El jefe del Partido Liberal Progresista (PLP), Eliécer Feinzaig, dijo que, como todo gobierno, hubo logros y fallas. “Es muy notoria la reactivación de la construcción de infraestructura y, aunque muchos de los proyectos venían de antes, es la realidad de los proyectos de obra pública”, apuntó.
El liberal agregó que es un informe con una “visión poco realista del estado en que queda el país” y destacó que Carlos Alvarado confunde reactivación económica con “recuperación de la economía pospandemia”.
“El presidente nunca entendió, en cuatro años, de qué iba la reactivación de la economía. Hay condiciones que impiden que la economía crezca a un ritmo más robusto, hemos venido creciendo a un ritmo mediocre”, acotó.
La jefa de la Unidad Social Cristiana (PUSC), Daniela Rojas, consideró que fue un discurso de despedida, más que una rendición de cuentas, pero dijo que hubo logros en posicionar el país en temas ambientales.
“Hay faltantes, en reducir costos de producción y de vida para los costarricenses, para generar más empleo. Se esperó por cuatro años y en ningún momento se hizo. Yo esperaba más humildad para reconocer que la Asamblea saliente colaboró en distintos proyectos que él se atribuye como logros”, acotó Rojas.
Entre esos, mencionó la reforma al Instituto Nacional de Aprendizaje (INA), la Ley Marco de Empleo Público, la de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas y la de Educación Dual.
Desde Liberación Nacional (PLN), la diputada Carolina Delgado reconoció el manejo de la pandemia por parte del gobierno de Alvarado, pero reclamó que muchos de los logros en aspectos financieros fueron posibles gracias al Congreso.
La guanacasteca Alejandra Larios acotó que un 13,6% de desempleo y un 26% de costarricenses en pobreza no suenan a una casa ordenada. Reclamó que las menciones a su provincia fueron mínimas y quedó debiendo mucho a la población.
El jefe del Frente Amplio, Jonathan Acuña, dijo que el informe de Alvarado dejó muchos sinsabores. “En desempleo, no cumplió. Intenta culpar a la pandemia por eso, pero antes de su gobierno era menos del 10% y justo antes de la pandemia ya estaba en un 12%”, reclamó.
Sobre las obras de infraestructura, puntualizó que entidades especializadas han cuestionado obras, como el paso a desnivel de las Garantías Sociales, que fueron pasados por alto.
Acuña enfatizó el caso de corrupción Cochinilla y que, durante el gobierno de Alvarado, ocurrió el asesinato de dos líderes indígenas, defensores de las tierras para sus pueblos, Sergio Rojas y Jehry Rivera.