La ministra de la Presidencia, Geannina Dinarte, les pidió a los diputados una prórroga en la fecha en que ella había prometido entregar textos sustitutivos para cuatro proyectos de la agenda pactada por Costa Rica con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En una carta del 26 de agosto, la jerarca había prometido que este viernes, 3 de setiembre, se entregarían nuevas redacciones de los proyectos sobre impuesto a las loterías, el de las casas de lujo, el plan sobre exoneraciones fiscales y el relativo a la contribución solidaria de empresas públicas.
No obstante, les pidió a los jefes de las fracciones parlamentarias seis días más, o sea, que le den tiempo para entregar las nuevas redacciones el próximo jueves 9 de setiembre.
En su carta, Dinarte aseguró que su petición se debe a que el FMI se encuentra en receso de vacaciones y regresaría a funciones el 7 de setiembre, por lo que prefiere no entregar las nuevas versiones de los proyectos sin que sean conocidas por el Fondo.
“El Gobierno de la República considera prudente acercar al FMI la información sobre el impacto de los rendimientos esperados con estos nuevos textos. Esto es relevante en la coyuntura de la primera revisión que la misión llevará a cabo en los meses de setiembre y octubre”, dice la carta de la ministra de Presidencia.
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La carta enviada a los voceros parlamentarios también esta firmada por el ministro de Hacienda, Elian Villegas.
En el documento, Dinarte también les reiteró a los congresistas que la misión del FMI que vendrá al país, entre finales de setiembre y principios de octubre, revisará el cumplimiento de las metas para la reducción del déficit fiscal prometidas por el gobierno de Carlos Alvarado, a cambio de un préstamo por $1.778 millones.
Finalizada la misión, la delegación emitirá un informe sobre el nivel de avance de la agenda pactada; de esto depende que el Directorio del Fondo apruebe un segundo desembolso del financiamiento.
Asimismo, la ministra insistió en que la ausencia de aprobación o avance de los proyectos provocaría una improbación en la revisión del Fondo Monetario y, a la vez, la suspensión del programa hasta que no haya un avance suficiente.
“A su vez, generaría incertidumbre en los mercados, que se manifestaría en presiones sobre las tasas de interés y, eventualmente, sobre el tipo de cambio y la inflación, con un impacto adverso sobre el crecimiento económico y la recuperación del empleo”, apuntó.
En el Congreso, la fracción del Partido Liberación Nacional ha manifestado varias dudas sobre proyectos de esa agenda, por lo que precisamente pidió textos sustitutivos.
En tanto, la Unidad Social Cristiana (PUSC) básicamente se ha opuesto a toda la lista de proyectos.