La Asamblea Legislativa declaró ciudadana de honor a Rosemary Karpinsky Dodero, la primera mujer en presidir el Congreso. Karpinzky, catedrática, política, diplomática y filósofa de 85 años, resultó electa diputada de la República por el Partido Liberación Nacional (PLN), durante el cuatrienio 1986 a 1990.
En su primer año como legisladora, asumió la presidencia legislativa, convirtiéndose así en la primer mujer costarricense en dirigir el Congreso. En aquella oportunidad le acompañaron en el Directorio Legislativo William Corrales Araya (PLN), en la primera secretaría, y Víctor Julio Román Méndez (PLN), en la segunda secretaría.
El proyecto para declarar ciudadana de honor fue aprobado por el plenario legislativo este miércoles 27 de abril al considerar que su presidencia constituyó un hecho histórico, “ya que establecía un nuevo paradigma de liderazgo femenino en la esfera política y, particularmente, en el Primer Poder de la República”, según la redacción.
“Por décadas, Costa Rica había contado con una pequeña representación femenina en el Congreso, muy lejos de alcanzar una representación paritaria y, sumada a ello, esa representación estaba relegada a un segundo plano. Con el rompimiento de este paradigma arcaico, se abrió espacio para que las mujeres ostentaran puestos reales de poder, además de establecer nuevas formas de liderazgo”, añade.
En la historia política de Costa Rica solo cuatro mujeres han alcanzado la presidencia del Congreso. Luego de Karpinsky, lo hicieron Rina Contreras, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) en el año 2000; Carolina Hidalgo, del Partido Acción Ciudadana (PAC), en 2018; y Silvia Hernández, del PLN, en 2021.
Si bien marcó la historia por ser la primera mujer en dirigir el Congreso, Karpinsky ejerció una carrera académica como profesora de Estudios Generales en la Universidad de Costa Rica (UCR), desde 1957 y hasta 1990, en la que formó generaciones de personalidades de la política nacional; y fue la primera mujer en obtener el grado de doctora en Filosofía en Costa Rica.
Antes de llegar al Congreso fue embajadora del país en Jerusalén, de 1974 a 1975, durante la administración de Daniel Oduber Quirós. Además, formó parte de la comisión encargada de crear la Universidad Nacional (UNA).
Además de Karpinsky, el Congreso declaró este miércoles, en la misma sesión, ciudadanas de honor a Ivonne Clays (1906-1994), de origen y nacionalidad belga, exprimera dama y la primera mujer diplomática del país; al pintor y escultor guanacasteco Otto Apuy Sirias; y a la jurista, política y profesora universitaria Sonia Picado Sotela.
Al mismo tiempo, los legisladores declararon Benemérito de la Patria a otras cuatro figuras nacionales reconocidas: Elena Pardo Castro (1927-2004), odontóloga de profesión, activista comunal y social limonense; a la exministra de Educación y Premio Magón, María Eugenia Dengo Obregón (1926 -2014); a la escritora y educadora guanacasteca María Leal Rodríguez (1892- 1989); y a la escritora Adela Ferreto Segura (1903 -1987).