
El ministro de Obras Públicas y Transportes, Randall Quirós, exoneró de toda culpa a la Constructora Belén Ltda. por las supuestas fallas que se le atribuyeron en la reconstrucción de la carretera Tárcoles-Jacó-Loma, de 60 kilómetros.
Esa obra fue ejecutada entre 1997 y el 2001. Al final, faltó la colocación de la carpeta de rodamiento en los últimos ocho kilómetros y, en sustitución, se colocó una carpeta de protección más delgada llamada "traba".
En marzo del 2003, el MOPT halló responsable a esa compañía de ejecutar trabajos adicionales no establecidos en el contrato y de hacer labores mientras el proyecto estaba suspendido.
A la empresa se le impuso una sanción de apercibimiento, que es una amonestación con la advertencia de que en una segunda ocasión la pena puede ser mayor.
Más problemas. El MOPT también sancionó a la compañía con el rebajo de las ganancias que obtuvo por la ejecución de obras adicionales como la entrada a playa Herradura, el bulevar de Jacó y la colocación de la traba.
Además, se rechazó el precio al que se pagó dicha capa.
La sanción del Ministerio también desconocía las ampliaciones de plazo que hubo en el proyecto, las exoneraciones, los aumentos de cantidades de materiales y los reajustes de precios.
Así lo indicó Luis Eduardo Herrera, uno de los propietarios. La resolución ordenaba a la administración analizar si debía recuperar dinero pagado a la empresa.
El pasado 3 de mayo, luego de tres revisiones de la primera resolución del 2003, Quirós declaró la nulidad absoluta de las sanciones al dar la razón a la empresa.
Luis Eduardo y Ramón Herrera, propietarios de Belén, destacaron el cierre de la fuente de materiales y el incumplimiento de las exoneraciones como las principales causas del atraso del proyecto.
Belén concursó por este contrato en consorcio con las empresas Dimón y Comesa.
Reconocimientos. En una resolución anterior del 2004, el exministro Javier Chaves también había atenuado la sanción y ordenó analizar el posible reconocimiento de costos a Belén.
Ahora, la empresa hará los reclamos de dinero que considere necesarios. Ya recibieron ¢183 millones como finiquito de la sección Tárcoles-Jacó y está pendiente el del otro tramo que, según Luis Eduardo Herrera, podría rondar los ¢150 millones.
Alejandro Molina, director del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi), informó de que ahora en esa entidad se analizarán los reclamos de la constructora. Antes, el MOPT había pagado cerca de ¢1.560 millones por las obras.