Por orden de la Contraloría General de la República, la auditoría interna del MOPT investiga el desempeño de las consultoras IMNSA Ingenieros consultores S. A. e Ingeniería y Perforación IP S. R. L. en los proyectos Tárcoles-Jacó y Jacó-Loma en los cuales se detectaron deficiencias en las obras iniciadas en 1997.
El presidente de IMNSA Ingenieros Consultores es Carlos Alberto Méndez Navas, primo del jerarca del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), mientras que el presidente de Perforaciones IP S. R. L. es Luis Alberto Méndez Libby, hijo del primero.
A Méndez Navas se le trató de localizar ayer, pero su secretaria dijo que se hallaba en reuniones que le impedían atender a la prensa. Lo mismo ocurrió con su hijo.
La investigación fue confirmada por la directora del Área Jurídica del MOPT, Rosaura Montero, quien habló a pedido del jerarca de ese ministerio, Rodolfo Méndez, a quien se consultó sobre el tema el miércoles anterior en una visita a este diario.
Montero señaló que el auditor, Baldomero Delgado, entregará un informe en los próximos días.
Dicho estudio según la abogada será básico para abrir o no un procedimiento administrativo.
Entre las anomalías, la Contraloría encontró el presunto uso y pago de 18.000 toneladas de una mezcla llamada "traba" no convenida en los contratos, además deficiencias en las obras.
Reajustes y contrato
De acuerdo con los contratos que el MOPT suscribió con esas empresas, dichas firmas eran las encargadas de supervisar la calidad de las obras.
El costo original de los contratos fue de ¢355,5 millones, pero luego se produjeron dos reajustes por una suma cercana a las ¢130 millones debido a que los plazos de ejecución se extendieron.
La semana anterior, el diputado de Fuerza Democrática José Merino denunció supuestos favorecimientos a esas empresas por los reajustes y la firma de un nuevo contrato por ¢127,8 millones.
Sobre el nuevo contrato Méndez afirmó que fue adjudicado por la Proveeduría Nacional el 9 de diciembre de 1998 con base en una recomendación técnica.
Acerca de los reajustes, dijo que el plazo de las obras se extendió por razones ajenas a las empresas.
Piedras en el camino
La orden de investigar a las consultoras surgió en abril de 1999, según el oficio 3844 dirigido a Rodolfo Méndez.
Méndez conformó una comisión con dos ingenieros y una abogada del Ministerio, la cual rindió un informe el 22 de octubre de 1999 que no fue de la satisfacción de la Contraloría porque, supuestamente, no se ajustó a lo que la Contraloría pidió investigar.