Entrevista a Franklin Chang

1. La gente lo ve y lo siente como un héroe. ¿Cómo se siente por eso?

"Es un sentimiento de altísima responsabilidad. Nosotros tenemos un deber que cumplir. El deber de darle a los niños la posibilidad de realizar sus sueños.

2. ¿Por qué sonríe Franklin Chang? La sonrisa es, precisamente, un rasgo de su personalidad.

(Ríe) "¡y ahora con frenillos!..."

... Esa sonrisa suya, ¿de quién la heredó?

"Yo creo que la heredé de mi mamá (María Eugenia Díaz). Ella siempre está muy sonriente. Es un don que lo gané de mi mamá, tal vez sin merecerlo, pero me lo gané.

3. Siendo así su temperamente, ¿qué logra enojar a Franklin?

"Muchas veces, lo que más me enoja es la falta de interés, de atención al detalle. Yo al enojarme no soy una persona que grite o levante la voz, pero sí creo que mis palabras se convierten en una insinuación muy seria de que hay que cambiar de acción y hay que tomar otro rumbo. Esto lo hago mucho con mis estudiantes. Generalmente, lo hago no diciendo a la persona "haga esto o lo otro", sino que "hagamos". Esto es algo que aprendí de mi papá. Él nunca se refería a la persona en singular.

4. Cada vez que viene a Costa Rica y regresa a su segunda nación, Estados Unidos, ¿no le da mal de patria?

"¡Claro! Por supuesto.

... ¿Y se le hace ese nudo en el estómago cuando nos deja?

"¡Claro que sí! Una de las razones por las cuales yo deseo que mis compañeros vengan es para que conozcan mi país. Es un deseo inconsciente de que si no me puedo llevar a Costa Rica a la NASA, me traigo a la NASA para Costa Rica.

5. Usted ha afirmado que "está viviendo su sueño". ¿Le queda algún otro que cumplir?

"¡Muchos otros, claro! Mi vida no es, en realidad, una serie de metas específicas sino un vivir en la continuidad de experimentar cosas nuevas".

6.¿Cómo se siente cada vez que le firma a alguien un pedazo de papel, un libro, una fotocopia de su fotografía?

"A veces, me pongo a pensar que, tal vez, un niño o una niña que tenga ese contacto por medio de un autógrafo o un estrechón de manos, o, simplemente, un contacto visual, me recuerda cuando yo era niño. ¡Lo que yo hubiera dado por tener un contacto con los ídolos míos de aquellos tiempos! En ese momento, me traspaso a la condición de niño y considero que para mí es un deber hacer ese contacto, aunque sea por una milésima de segundo, que muchas veces es la única que hay. En una milésima de segundo se traspasa, tal vez, una sensación de confianza en el futuro de ese niño. Que ese niño reciba ese mensaje y lo utilice de una forma positiva para seguir adelante en la búsqueda de sus sueños".

... pero, ¿no se cansa?

"Claro, sí es algo muy cansado, claro. Pero es algo satisfactorio. Cuando termina una jornada de este tipo y regresa uno a su casa, si de esas personas tal vez hay una, dos, tres -espero que muchas más--, que a raíz tal vez de un contacto de este tipo no solo conmigo, sino con ayuda de sus padres y de muchos otros... si esa persona puede construir ese edificio de esperanza, me daré por satisfecho.

7. ¿Qué opina sobre el turismo espacial? ¿Tiene algún sentido hacer viajes al espacio sin un fin científico?

"Veo eso muy positivamente. Me parece que es algo excelente. Estamos viendo algo similar a lo que sucedió en 1802, cuando los exploradores Louise y Clarke fueron contratados por el gobierno norteamericano para abrir una ruta hacia el oeste. Esto abrió un panorama al resto del país, se dio la expansión y vino una gran prosperidad. Yo veo en esto un parelelo a lo que está sucediendo en el espacio, pero ya no como la acción de un país sino la acción conjunta del planeta, donde se establece la capacidad de transporte y se le abre esa oportunidad al sector privado y al sector industrial para ir a buscar nuevas formas de vida.

8. ¿Cómo visualiza usted el futuro de nuestro planeta si seguimos con su degradación?

"El problema ambiental es un problema muy serio porque es un problema cuya solución depende de decisiones que tomemos hoy sin tener toda la información a nuestra disposición. Claro, nosotros, con medidas que se toman, censores vamos aprendiendo un poquito más del planeta y podemos extrapolar a cómo es que el planeta puede resultar a unos 50 o 100 años. Podemos estar errados porque los conocimientos no son tan precisos como para poder determinar el resultado perfecto. Pero hay dos posibilidades: que el resultado sea correcto o incorrecto. Si el resultado es correcto, entonces estamos haciendo por supuesto lo correcto. Si el resultado es incorrecto, en realidad nos salvamos a pesar de no tomar decisiones correctas, pero nos salvamos viviendo una vida mejor de todas maneras.

9. ¿Cuál es el futuro en los próximos años, según lo que ustedes visualizan desde la NASA?

" El planeta tiene ahora más de 6000 millones de habitantes que tienen el derecho a vivir bien, a educar a sus niños, a llevar una vida buena. Pero eso no está sucediendo en estos momentos. Hay muchas guerras, hay varias decenas de guerras simultáneamente en varios lugares del mundo, tenemos hambre y tenemos, también abundancia en otros lados. Es una inhomogeneidad en la distribución de los recursos del planeta. Si esos 6000 millones lograran tener el acceso a los recursos, creo que sería muy difícil para el planeta sostener el desgaste energético que eso devengaría. Yo creo que lo que está pasando es que la humanidad ya tiene un peso suficiente como para afectar la sostenibilidad. A menos que podamos impedir el crecimiento de la población, lo cual me parece a mí que requeriría medidas extremadamente drásticas. Vamos a tener que aceptar la necesidad de expandernos a otros lados, por justicia humana.

10. Y Marte, ¿qué papel juega en esa nueva visión?

"No necesariamente vamos a ir todos a vivir a Marte. No es eso. Tampoco sabemos si es posible vivir en Marte. Estamos hablando a plazos de 50, 100, tal vez 500 años: son pasos muy gigantes. No podemos decir qué va a pasar o qué vamos a encontrar en otros planetas, y si es posible, inclusive que la humanidad pueda vivir fuera del planeta, no en otro planeta, sino en colonias espaciales tal vez. Tal vez, utilizando recursos naturales que provengan de asteroides, que es otra posibilidad. Que las fábricas de materia prima ya no existan en la superficie de la Tierra sino que estén montadas en asteroides, lo cual eliminaría la contaminación en nuestra atmósfera con estas fábricas, produciría una gran cantidad de productos que no tendrían que sacarse del campo gravitacional de la tierra para llevarlos al espacio. Tendríamos con ello industrias completamente nuevas, una visión nueva de la producción. Son cosas muy futuristas pero uno tiene que ponerse a pensar en esas cosas porque el futuro no va a sentarse a esperar a que nosotros nos decidamos.

11. Doña María Eugenia (su mamá) dice que gran parte de lo que usted ha logrado ahora lleva el sello de su esposo, don Ramón Chang. Y dice que ella está segura de que don Ramón, desde algún sitio del universo infinito, disfruta de los éxitos de su hijo. ¿Cómo lo siente Franklin?

"Hay una cierta mística con mi papá, digamos un lazo muy estrecho de maestro y alumno. Para mí, mi papá era la persona que podía solucionar problemas de una forma muy eficaz, con un mínimo de gasto intelectual. Y, casualmente, en la última misión, en las caminatas, sentía la presencia de mi papá. Tal vez era algo que me permitía sobrellevar el estrés de la actividad fuera del vehículo, y era la presencia de mi papá que siempre me enseñaba cómo era que se resolvían los problemas. Yo muchas veces, cuando tengo un problema muy difícil, me hago la pregunta: cómo hubiera resuelto mi papá ese problema, y, por lo general, logro contestar la pregunta de una forma muy acertada.

12. La experiencia de ver el mundo y de sentir el universo desde un transbordador espacial y caminando, ¿qué imagen la da de Dios?

"Yo, como le decía a muchos de los periodistas, no soy una persona religiosa. Mi creencia en Dios es dirigida a una entidad suprema, la cual no puedo entender, pero que en este momento no es lograr entender ese aspecto, sino más el aspecto más práctico de la vida, que es la resolución de problemas más presentes en este momento. Yo soy un científico y estoy buscando respuestas a incógnitas que quizá las pueda entender tal vez con un poquito de trabajo y con la ayuda de otras personas poder explicar el comportamiento del mundo y poder duplicar algunos aspectos que vamos descubriendo. Tal vez nos estamos acercando un poquito a Dios, pero es un acercamiento que tardaría mucho para nosotros el poder llegar directo a esa posición.