Cartago. A partir del próximo 15 de enero el consorcio alajuelense Lumaca será el encargado de brindar el servicio de transporte público de buses de la ruta San José-Cartago y viceversa.
El Consejo de Transporte Público (CTP) tomó antier la decisión de dar la concesión a esta empresa, en sustitución de la Sociedad de Autotransportes de Cartago (Sacsa), que tuvo el permiso por 60 años.
Aunque en primera instancia el Consejo había determinado que el cambio de empresa se diera a partir de hoy, las seis empresas concursantes en la licitación explicaron que era materialmente imposible hacerlo.
Lumaca asegura que pondrá a disposición de los cartagineses 102 buses, de los cuales 22 son modelo 2005; 10 son del 2003; otras 10 del 2000 y ocho de 1999.
Los 50 restantes superan el modelo 90, pero serán sustituidos en un plazo máximo de 120 días por unidades del 2006.
Así lo aseguró el gerente general de Lumaca, Adolfo Fallas, quien agregó: "Optimizaremos sustancialmente el servicio, con el fin de que haya una satisfacción general en toda la comunidad".
Lumaca está conformada por las empresas de transportes Montecillos, Veintitrés Uno, Villa Bonita, Inversiones La Tropicana, Hermanos Fallas Segura, Corporación El Sol Dorado y Transportes Unidos Alajuelenses.
Esta última compañía es propiedad del conocido empresario Marvin Herrera, socio nacional de la transnacional Riteve, encargada de la revisión técnica automotor en nuestro país.
Inversión. En su propuesta, Lumaca anunció tener ¢ 1.560 millones dispuestos para afrontar esa responsabilidad y se comprometió, en un plazo no mayor de 30 días, a ofrecer terminales debidamente acondicionadas en Cartago y la capital.
También anunció que absorberá la mayoría de empleados (cerca de 100) que quedan cesantes en Sacsa, atendiendo la solicitud del aAlcalde de Cartago, Carlos Góngora.
Sacsa tenía 60 años de dar este servicio, pero en los últimos años tuvo un declive económico que hizo que tuviera que vender la terminal de Cartago y tener en prenda la de San José.
A esto se suman deudas millonarias con instituciones estatales y entidades bancarias privadas.
Asimismo, las constantes quejas de usuarios en los últimos años, del actual concejo municipal y los accidentes ocurridos por supuesta falta de mantenimiento, precipitaron la suspensión del contrato.
Por último, el CTP solicitó a la Defensoría de los Habitantes vigilar el proceso de transición del servicio en favor del usuario.
También se pedirá a la Dirección de Tránsito que vele para que que Sacsa brinde un buen servicio este último mes.