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Los diputados tuvieron la oportunidad, la tarde de este jueves, de nombrar al menos un nuevo miembro de la Junta Directiva del Banco Central de Costa Rica, y con ello evitar que esa entidad se quede sin órgano director.
Pero la negligencia les ganó a los legisladores y desaprovecharon esta ocasión, por lo que, a partir del lunes, esa Directiva no tendrá la cantidad necesaria de integrantes para poder sesionar.
De nuevo, en el plenario los congresistas rechazaron los nombramientos de Roxana Morales, pendiente desde hace un año y cuatro meses, y el de Miguel Gutiérrez Saxe, propuesto hace nueve meses. En este último caso, el nombramiento ya estaba muerto, pues se debe nombrar a una mujer para cumplir con la paridad de género en esa Junta Directiva.
Sobre Morales, el presidente legislativo Rafael Ortiz explicó que las razones de los legisladores fueron diversas para votar en contra y que, en su caso personal, se acogió a la línea de la fracción del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC).
La de este jueves era la última oportunidad de los legisladores, porque a partir del domingo el órgano director del BCCR pasará a tener solo cuatro miembros, de los siete que la componen, debido al vencimiento del plazo del nombramiento de Silvia Charpentier.
El problema es que la ley orgánica del Central impide que su junta pueda sesionar con menos de cinco miembros, pues de hecho esa es la mayoría requerida para tomar la mayoría de decisiones en esa importante entidad.
En la Junta Directiva del Central hay siete miembros: el presidente del Banco (Olivier Castro) y el ministro de Hacienda (Helio Fallas), ambos nombrados por el Gobierno, en tanto otros cinco miembros son nombrados por un plazo de siete años y medio, cada uno, decisión que está sujeta a la ratificación del Congreso.
Entre las funciones de la Junta está establecer el régimen cambiario, el tipo de cambio, la política monetaria, las tasas de interés y de descuento, así como el encaje mínimo.
Marco Redondo, jefe de fracción del oficialista Partido Acción Ciudadana (PAC), criticó la falta de ganas que tuvieron los diputados para ver el tema y adujo que desde hace algunos meses se ha solicitado a la oposición cumplir con el trámite. "Siempre habrá justificaciones para tratar de eludir la responsabilidad, si se hace más habrían dicho que es excesiva presión", alegó.
Por su lado, Ortiz aseguró que al Gobierno se le había pedido, desde hace varios meses, que sustituyera los nombres de Morales y Gutiérrez por otros, pero que no se hizo.
