Los estados de cuenta de apenas un 10 por ciento de los inversionistas de la casa de cambio “The Brothers” (Los hermanos) revelan que esa operadora adeuda $88 millones (más de ¢33.000 millones) solo a ese pequeño grupo de 636 clientes.
Ese monto, revelado en un informe judicial al cual tuvo acceso La Nación , es 1,7 veces mayor que las pérdidas del extinto Banco Anglo y equivale al 80 por ciento del patrimonio del banco más grande del país, el Nacional, que no tiene ninguna relación con el caso.
La lista total de inversionistas asciende a 6.289, pero la Fiscalía de Narcotráfico solo pudo recuperar registros de las operaciones del 10 por ciento de ellos, en un allanamiento realizado en la casa de cambio el 4 de julio.
Las inversiones documentadas se realizaron entre setiembre de 1998 y este año y generaban intereses de 3 por ciento mensual sobre el monto principal en dólares.
Si el cliente optaba por capitalizar los intereses, “The Brothers” le pagaba un 2,8 por ciento mensual por esos fondos. Ese atractivo adicional hizo que el 40 por ciento de los inversionistas (245) decidiera reinvertir sus intereses, de acuerdo con el reporte judicial.
La operadora Ofinter (conocida como “The Brothers”) era administrada por los hermanos costarricenses Luis Enrique y Osvaldo Villalobos y se manejaba con estrictas reglas de ingreso y confidencialidad, según se desprende de los documentos decomisados por la Fiscalía.
Aunque los Villalobos operaban una casa de cambio regulada por la Superintendencia General de Entidades Financieras (SUGEF), las operaciones de intermediación financiera no tenían supervisión alguna.
La Fiscalía de Narcotráfico intervino la operadora el 4 de julio pasado y congeló $7 millones de sus cuentas a solicitud de las autoridades canadienses, por indicios de lavado de dinero.
Osvaldo fue detenido el miércoles y se desconoce el paradero de su hermano Enrique, quien fue víctima de un intento de homicidio, en 1995. En esa oportunidad habló de su vida y sus negocios con La Nación nota aparte.
Extendida estructura
Las inversiones mínimas en la financiera de los Villalobos eran de $10.000. ´Los aportes se hacían en efectivo, en cheque o por transferencias bancarias.
A cambio, los Villalobos entregaban un cheque sin fecha de una cuenta personal a nombre de Enrique.
La Fiscalía decomisó copias de varios cheques “de garantía” emitidos contra una cuenta de Enrique Villalobos en el Nacional.
La cuenta, según la Sección de Delitos Económicos del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), no tiene movimientos desde 1997 y mantenía un saldo inferior a los $5.000, “insuficientes como para servir efectivamente de garantía”, agrega el informe.
Hasta ahora se han identificado 62 sociedades mercantiles relacionadas con las operaciones de los hermanos Villalobos.
Una investigación del Instituto sobre Drogas siguió el rastro de las cuentas bancarias que esas sociedades han utilizado y detectó 105, de las cuales 41 son extranjeras y el resto costarricenses.
Sigilo y protección
No era cualquiera el que podía invertir en “The Brothers”, sino que debía contar con una recomendación escrita de los clientes de confianza o una autorización expresa de los cuatro administradores de la casa de cambio.
Los empleados de la firma tenían instrucciones claras de proteger la identidad de los clientes y de extremar cuidados cuando era necesario dejarles un mensaje telefónico relacionado con sus inversiones.
Las instrucciones incluyen comentarios como estos: “Idealmente, la recomendación nos indica qué tan bien conoce nuestro cliente al prospecto (cliente nuevo). La "regla" que le ponemos es que debe conocerlo suficientemente bien para hacerse socios en negocios, o bien tenerle al prospecto confianza con dinero propio”. Varias frases se repiten en el “manual”, como “nunca confirme que alguien es beneficiario por teléfono”.