Quito (AP). Ecuador cuenta con una nueva Constitución de estilo socialista que tras ser aprobada en forma contundente el domingo por el 64% del electorado permitirá ahora al presidente Rafael Correa consolidar su proyecto político y pensar en las elecciones de febrero de 2009.
Gracias a Dios mi triunfo ha sido tan contundente y tan aplastante, más allá de todas nuestras expectativas, dijo el mandatario en un encuentro con la prensa extranjera.
El Tribunal Supremo Electoral informó el lunes que con más del 90% de las actas escrutadas, la nueva Constitución fue aprobada en referendo por el 64,02%. La opción del no sumó el 28,09%, los nulos 7,18% y los votos blancos 0,72%.
Según esos resultados, la opción del sí venció categóricamente en casi todo el país, a excepción de dos de las 24 provincias donde ganó el no.
La nueva Constitución contempla nuevas elecciones generales que deberán cumplirse el próximo año y el país da por sentado que Correa será candidato sin dejar el cargo pero el presidente aclaró que la decisión de su candidatura está en manos de su movimiento político, Alianza PAIS.
Tengan la certeza de que estoy aquí solo para tratar de servir a mi patria, no me interesa el poder y estoy tan cansado que hasta le pediría a mi movimiento que busque otro candidato, pero estaré donde mi patria me necesite. Si puedo ser útil nuevamente como presidente de la república ahí estaré, afirmó.
Para las próximas elecciones no se avizoran en el panorama político líderes de peso que puedan reemplazar o competir con Correa. El presidente terminaría anticipadamente el periodo para el cual fue elegido, que concluía en el 2011, se presentaría a las elecciones como un primer periodo con posibilidad de ser elegido hasta el 2017.
El mandatario ha realizado campañas electorales en los últimos dos años y en todas las elecciones ha ganado contundentemente.
El triunfo del domingo también evidenció que la oposición una vez más recibió una paliza como calificó Correa al triunfo sobre quienes se oponían a su proyecto.
La noche del domingo, el gobernante que se identifica como cristiano de izquierda y busca instaurar el socialismo del siglo XXI, destacó que en el referendo, el Ecuador ha decidido un nuevo país.
Las viejas estructuras han sido derrotadas. Esta es la confirmación de esa revolución ciudadana que ofrecimos al pueblo, dijo.
Con la nueva Constitución se dejará atrás esa nefasta época neoliberal ... y empezamos la construcción de esa patria nueva, más justa, más solidaria, más equitativa, añadió.
Jaime Nebot, alcalde derechista de Guayaquil, la ciudad más grande del país y feudo de la oposición, expresó su saludo y respeto para un resultado democrático a nivel nacional pero hay que respetar el verdadero resultado democrático de Guayaquil que dijo no.
En las últimas semanas, esa ciudad que impulsa un proyecto autonómico, fue centro de disputa de los votos de oficialismo y de la oposición.
La Carta Política, la vigésima en la historia del país, establece la posibilidad de reelección presidencial, una mayor presencia del estado en la economía, nuevos derechos ciudadanos, cambia al sistema económico social de mercado por uno social y solidario, prohibe la instalación de bases extranjeras en el país, entre otras cosas.
Pierina Correa, hermana del presidente y alta dirigente del partido de gobierno señaló a la AP que empezarán a prepararse para las próximas elecciones porque es un proceso sumamente importante, de enorme responsabilidad porque estaríamos comenzando todo un nuevo capítulo en la historia del país.
Hernán Reyes, analista político y catedrático de la Universidad Andina Simón Bolívar, cree que con la aprobación de la Constitución se profundiza la agenda del cambio.
En entrevista con la AP, afirmó que no se trata solo de que la noche a la mañana los ecuatorianos tendrán un nuevo pacto social. De hecho es un camino largo que tendrá que irse construyendo de a poco, dijo.
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El periodista de AP, Gonzalo Solano, contribuyó con esta información.