Cientos de sacerdotes católicos pudieron morir desde 1980 de enfermedades relacionadas con el virus del sida en Estados Unidos y muchos otros padecen esa enfermedad, según un informe publicado en fecha reciente.
De acuerdo con el diario Kansas City Star, el porcentaje de sacerdotes que mueren a causa del sida en este país es al menos cuatro veces mayor que el de la población general.
En dicha investigación se constata que al menos 100 sacerdotes murieron de enfermedades relacionadas con el virus del sida desde 1980.
Sin embargo, según expertos entrevistados por el diario, dichas estadísticas son bastante conservadoras.
Richard Sipe, un exsacerdote que durante 30 años ha estudiado asuntos relacionadoas con la sexualidad en la Iglesia Católica, indicó que el número de muertes por el sida entre los sacerdotes puede sobrepasar los 700.
Una encuesta, basada en un cuestionario enviado a 3.000 sacerdotes de Estados Unidos, indica que el 60 por ciento de los 800 que contestaron las preguntas, dijeron tener conocimiento personal de la muerte por sida de al menos un compañero.
Uno de cada tres encuestados afirmó que sabía de sacerdotes que están enfermos de sida.
La encuesta, que tiene un margen de error de un 3,5 por ciento, incluyó además el examen de certificados de defunción y entrevistas con familiares y amigos de varios religiosos.
El estudio subraya que, si bien los sacerdotes católicos no son los únicos que están padeciendo la enfermedad, los datos arrojan cierta luz sobre dos de los temas tabúes en esa religión: el celibato y la homosexualidad.
"Creo que el mensaje más importante es que, como cualquier otra porción de la población, los sacerdotes necesitan educación sexual e información sobre cómo prevenir estas enfermedades", concluyó Farley Cleghorn, epidemiólogo del Instituto de Virología Humana en Baltimore.
"La iglesia y las órdenes religiosas deben tomar conciencia de que hay un problema, los sacerdotes están teniendo relaciones sexuales y son susceptibles a (contraer) enfermedades de trasmisión sexual incluyendo el sida", sentenció.
Portavoces de la Iglesia Católica no comentaron el asunto.