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La Haya. AFP y Reuters. La Corte Internacional de Justicia (CIJ), en La Haya, Holanda, la instancia judicial más alta de Naciones Unidas, consideró que Serbia no organizó un genocidio en Bosnia durante la guerra de 1992-95, pero no impidió la masacre de Srebrenica, calificada de genocidio.
Serbia no cometió un genocidio en Bosnia y “no hay motivos para ordenar que se paguen indemnizaciones”, según el veredicto de la CIJ, leído por la presidenta Rosalyn Higgins.
Sin embargo, la propia CIJ condenó la masacre de unos 8.000 musulmanes en Srebrenica en 1995, y reconoció que los serbios pudieron haberla impedido, pero el veredicto señaló que “las acciones de quienes cometieron un genocidio en esa localidad no pueden ser atribuidas directamente al acusado”, declaró Higgins.
“El acusado (gobierno serbio) tenía una posición de influencia sobre los serbios de Bosnia y hubiera debido desplegar todos sus esfuerzos para prevenir los acontecimientos trágicos que se anunciaban”, especifica el veredicto.
La querella presentada por Bosnia se refería al conflicto global, y no a Srebrenica en particular. Por otra parte, había sido presentada en 1993, y la matanza en ese enclave protegido por la ONU tuvo lugar en 1995. La guerra de Bosnia dejó 200.000 muertos.
Las masacres perpetradas en julio de 1995 después de la toma de Srebrenica, un enclave que se encontraba bajo la protección de los cascos azules de la ONU, “fueron actos de genocidio cometidos por miembros del ejército serbio bosnio”, manifestó Higgins.
Reacciones. El presidente serbio, Boris Tadic, calificó de importante el veredicto de la CIJ, pues quedó establecido que Serbia no cometió un genocidio, enfatizó.
“Sin embargo, la parte del veredicto que constata que Serbia no hizo nada para impedir el genocidio en Srebrenica es muy dura para nosotros”, insistió Tadic, pidiendo que sean arrestados lo antes posible todos los responsables de crímenes de guerra.
Del otro lado de la moneda, en Bosnia, la decisión de la Corte causó un fuerte impacto.
“Nosotros que estuvimos en Bosnia sabemos lo que pasó desde el principio de la guerra y se lo voy a enseñar a mis hijos”, dijo el líder bosnio-croata Zeljko Komsic.
Para Fatija Suljic, de 60 años, quien perdió a su esposo y tres hijos en el genocidio de Srebrenica, el fallo agregó ofensa al daño. Suljic considera que la decisión del tribunal constituye “un verdadero desastre para el pueblo bosnio”.
Por su parte, el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Javier Solana, aplaudió el fallo de la Corte y resaltó el hecho de que no hubiera una “sanción colectiva”.
Según Solana el veredicto contribuirá a dar vuelta a una página de la historia, dramática y dolorosa para mucha gente, y probablemente ayudará a la “reconciliación final entre los pueblos”.
