Texto original publicado por La Nación el 1 de febrero de 1972.
El presidente Richard M. Nixon dio hoy nuevos indicios que respaldan las informaciones de que ha llegado a un acuerdo con el Primer Ministro Chou En-Lai para permitir, por lo menos, viajes e intercambios limitados de personas entre ambos países. En dos oportunidades durante la primera excursión turística que hace fuera de la capital, el gobernante norteamericano habló encomiásticamente de los viajes internacionales y, particularmente, a China.
Durante la visita a la Gran Muralla China, Nixon observó: “Mi esperanza es que en el futuro, quizá como resultado del comienzo que hemos hecho en este viaje, muchos, muchos norteamericanos, particularmente los jóvenes, a quienes tanto gusta viajar, tengan una oportunidad de llegar aquí”.
Poco más tarde, cuando recorría las tumbas de la dinastía Ming, los periodistas le preguntaron si los norteamericanos debían solicitar visados turísticos en China. El presidente dijo que una respuesta directa deberá aguardar al comunicado conjunto que se dará al término de su visita.
Pero “en un sentido general”, agregó, consideraba que “sería muy valiosa y conveniente” que los norteamericanos y ciudadanos de otras naciones recorran China. “Espero que mis hijas y sus hijos también tengan la oportunidad de venir aquí”, afirmó el gobernante.
En otras noticias:
Graves daños por turbonadas en la zona norte
El señor Eduardo Mora, delegado de la guardia rural que tiene jurisdicción en toda la zona norte del país, informó ayer que en las zonas de Guanacaste fueron graves los daños que causaron las violentas turbonadas que se experimentaron en todo el país a fines de la semana pasada.
Se informó de daños serios en muchas poblaciones. Dijo que una de las más afectadas fue Miramar de Puntarenas. Numerosos edificios, la terminal de buses, casas de habitación, e instalaciones agrícolas, fueron destechadas. Muchos árboles, arrancados por el viento, obstruyeron as vías públicas y algunos cayeron sobre viviendas.
Recalcó que no hubo víctimas. El señor Mora y varios subalternos suyos prestaron toda la ayuda que la gente requirió. Entre otras cosas, los fuertes vientos también provocaron que una lancha se hundiera en Limón y varias casas se incendiaron en Alajuela y Cartago.
Menor se ahogó en Barranca
Un menor de 14 años, de vecindario desconocido, pereció ahogado en el río Barranca, entre el puente de la carretera y el paso ferroviario. Según se informó, dos hermanos menores del fallecido estaban en el río y parecía que se encontraban en peligro. Sin pensarlo mucho, se lanzó al agua.
Inmediatamente intervinieron trabajadores que estaban cerca, no pudieron hacer nada por la víctima, pero ayudaron a rescatar a los menores en peligro, los cuales fueron conducido en una unidad motorizada de la guardia rural hasta el hospital de Puntarenas.
Los dos niños, que efectivamente se estaban ahogando, fueron salvados. El hermano mayor falleció en su intento de protegerlos. El caso fue puesto en conocimiento de las autoridades judiciales. El cadáver fue enviado al hospital de Puntarenas.