Malé, Maldivas. El pequeño archipiélago turístico de las Maldivas, en el océano Índico, se hundía este martes en un caos político tras la detención del presidente de la Corte Suprema y con la oposición pidiendo una intervención internacional para derrocar al presidente Abdulá Yameen, que denuncia una “conspiración”.
El presidente de la Corte Suprema, Abdulá Saeed, y otro juez fueron detenidos a primera hora del martes bajo cargos de “corrupción” por policías fuertemente armados.
La detención se produjo cinco días después de que el tribunal superior desafió al régimen maldivo al ordenar el levantamiento de las sentencias que pesaban contra nueve de los opositores más prominentes.
El presidente de Maldivas decretó el lunes el estado de emergencia por 15 días, después de haberse negado la semana pasada a liberar a los presos políticos.
“Estaba en la obligación de declarar el estado de emergencia porque no había ningún otra manera de investigar a estos jueces. Primero teníamos que suspender su autoridad y su inmunidad, porque debemos descubrir hasta dónde llega la conspiración o el golpe de Estado”, justificó el presidente Yameen en un mensaje en televisión.
Según su versión, el presidente de la Corte Suprema estaba operando para destituirlo.
Frente a esta situación de inestabilidad, varios países -entre ellos Francia, China e India-, aconsejaron a sus ciudadanos abstenerse de realizar viajes turísticos a este archipiélago de 340.000 habitantes, conocido por playas paradisíacas de arenas blancas y mar turquesa.
Pugna de poderes
El fallo incluyó la anulación de la condena del expresidente Mohamed Nasheed, quien vive exiliado en Reino Unido.El exmandatario de las Maldivas y hermanastro de Abdulá Yameen, Maumoon Abdul Gayoom, fue detenido el lunes por la Policía, según su hija.
Mientras, el Parlamento, controlado teóricamente por la oposición, está suspendido desde el sábado.
“El presidente Yameen declaró ilegalmente la ley marcial y se apoderó del Estado. Debemos expulsarlo del poder. El pueblo de las Maldivas tiene una solicitud legítima para los gobiernos del mundo, incluidos India y Estados Unidos”, denunció Mohamed Nasheed en un comunicado.
Pidió al Gobierno de India el envío de un representante “apoyado por su Ejército, para liberar a los jueces y a los presos políticos, entre ellos el expresidente Gayoom. Pedimos una presencia física”, afirmó.
Nasheed fue condenado en el 2015 a 13 años de cárcel por “terrorismo”, pero en el 2016 logró salir a Gran Bretana, donde se asiló, gracias a un permiso médico.
En el pasado, India ya ha intervenido militarmente en el archipiélago En 1988, en el marco de la “operación Cactus”, desplegó a sus tropas para impedir un intento de golpe de Estado contra Maumoon Abdul Gayoom, hoy de 80 años y opositor, quien gobernó el país durante 30 años (1978-2008) con mano de hierro.
La oposición también pidió que Washington “garantice que las instituciones financieras estadounidenses interrumpan todo tipo de transacciones en dólares de los responsables del régimen en Maldivas”.
La instauración del estado de emergencia refuerza los poderes ya muy amplios de las fuerzas de seguridad para detener a los sospechosos, y tiene lugar en un contexto de tensión entre el Tribunal Supremo y el Gobierno.
El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, “exhorta al gobierno de Maldivas a respetar la Constitución y el imperio de la ley”, y a “levantar el estado de emergencia lo más rápido posible”, según un comunicado difundido este martes.
Por su lado, Amnistía Internacional pidió la liberación de los jueces y opositores presos e indicó que el “estado de emergencia no puede usarse para perpetrar lo que parece una purga contra la Corte Suprema y la oposición”.
La represión del presidente Yameen contra la oposición ha empañado estos últimos años la imagen paradisíaca de este pequeño archipiélago del océano Índico. El Gobierno declaró el lunes que el Supremo no está por encima de la ley.
La decisión del alto tribunal suponía un revés para el presidente Abdulá Yameen y abría la posibilidad de que su gran rival, el expresidente Nasheed, regresara al país y se presentara contra él en las próximas elecciones.