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Nairobi. AP La suposición de que las partes del cuerpo de los albinos tienen poderes mágicos ha obligado a miles de africanos que presentan esa anomalía en la pigmentación a ocultarse, temerosos de perder sus vidas o sus miembros ante comerciantes sin escrúpulos.
Esos mercenarios pueden ganar hasta 75.000 dólares vendiendo a un albino descuartizado.
Mary Owido, que carece de los pigmentos que dan coloración a la piel, ojos y cabello, dice que solo está tranquila cuando está en su trabajo o en su hogar con su marido y sus hijos.
“Dondequiera que voy la gente empieza a hablar sobre mí, diciendo que mis piernas y manos pueden representar una fortuna en Tanzania”, dijo Owido, de 36 años. “Este tipo de comentarios me intimida”.
Desde el 2007, 44 albinos han sido asesinados en Tanzania y 14 en Burundi, lo que ha causado pánico entre las personas con esa condición en el este del África.
Por lo menos 10.000 han sido desplazados o se han escondido desde que comenzaron las matanzas, según un informe difundido por la Federación Internacional para la Cruz Roja y la Media Luna Roja.
El más reciente asesinato ocurrió a fines de octubre en Tanzania, cuando cazadores de albinos decapitaron a Gasper Elikana, de 10 años, y le cortaron una pierna, dijo el informe.
El albinismo es una afección hereditaria pero ocurre solo cuando ambos padres tienen genes del albinismo. Los seis hijos de Owido tienen color normal.
Los albinos africanos soportan insultos, discriminación y segregación durante toda su vida. También corren alto riesgo de contraer cáncer de piel en una región donde muchos trabajos se realizan a la intemperie.
El incremento en el uso de partes del cuerpo de una persona albina como amuleto es resultado de una “especie de ejercicio de marketing por los médicos brujos”, informó la Federación Internacional de la Cruz Roja y Media Luna Roja.
El informe señala que la comercialización de miembros de albinos se presenta principalmente en Tanzania, donde un juego completo de partes del cuerpo, puede venderse en 75.000 dólares. Se usan como talismanes.
